El reciente desembarco del grupo alemán Henkell en Freixenet, con un 50,67% del capital, pretende tejer una alianza en la que ambas compañías potencien sus sinergias y presencia en mercados con el objetivo de lograr el 10% de cuota de mercado mundial de vinos espumosos en el 2025, frente al 8% actual.

En un encuentro para dar detalles de la 'nueva' Freixenet, los consejeros delegados de la compañía --Pedro Ferrer y Andreas Brokemper-- han desgranado la cronología que ha dado pie al líder mundial en espumosos, un mercado en rápido crecimiento, como es el caso de Reino Unido y Estados Unidos, auspiciado por un cambio de hábitos que amplía su consumo más allá de lo ocasional.

La alianza de Henkell --que pertenece al grupo Oetker-- con la compañía elaboradora de cava pretende consolidar un liderazgo internacional y, con el foco en los espumosos, el objetivo es sobrepasar los 300 millones de botellas al año.

Ambos directivos han insistido en que la entente entre los dos productores tiene una visión a largo plazo, siendo complementarios en muchos países, donde ya se está trabajando para unir equipos y culturas corporativas.

MARCAS PRIORITARIAS

Según ha especificado Pedro Ferrer, la prioridad del grupo será, por este orden, las marcas Freixenet, Mionetto y Henkell, centrándose en los espumosos.

En este sentido, Ferrer ha explicado que en consecuencia con esta línea estratégica otros segmentos están en revisión, como son los vinos tranquilos y de mesa, y se contemplará llegado el momento materializar desinversiones.

Al preguntársele por si esta alianza a su vez podría conllevar alguna reestructuración en empleos, Ferrer ha asegurado que no está prevista y ha ahondado en la complementariedad de ambas compañías.

Brokemper sí ha añadido que se trabaja para combinar ambas estructuras, país por país donde operan, y cada año se evaluará lo que es necesario para ser más eficientes y productivos.

PROSECCO EN NAVIDAD

Durante el encuentro, Ferrer ha avanzado que esta Navidad Freixenet venderá prosseco con su enseña en el mercado español, después de que las ventas obtenidas fuera hayan ido mucho mejor de lo previsto.

Según ha detacado se consume más entre un público más joven, más extendido en los denominados 'millenials', sobre todo en Estados Unidos.

"Es una gran oportunidad", ha reiterado Brokemper, confiado del potencial de este producto, que en España podría comercializarse a un precio de unos 12 euros.