La víspera de que el real decreto ley de liberalización de la estiba sea votado por el pleno del Congreso, el Gobierno ha dado un paso para evitar su derrota y que al menos dos grupos parlamentarios (Ciudadanos y PNV) le apoyen. Íñigo de la Serna, ministro de Fomento, ha ofrecido financiar las prejubilacionesvoluntarias, con el 70% del salario, de los estibadores a los que les queden 60 meses o menos para llegar a la jubilación ordinaria, que es de 55 años en este sector.

De la Serna ha hecho esta propuesta en la reunión técnica entre las empresas y los sindicatos con el mediador Marcos Peña, presidente del CES. El titular de Fomento ha ido acompañado del secretario de Estado de Infraestructuras, Julio Gómez Pomar y el director general de Empleo, Javier Thibault.

La propuesta de Fomento está en sintonía con la que realizó la semana pasada la patronal Anesco a la Coordinadora estatal de trabajadores del Mar (CETM) en la que se comprometía a mantener el empleo fijo a cambio de que los sindicatos negociaran un nuevo convenio colectivo. Los empresarios, además, consideran que para cumplir con la sentencia europea deL 2014, las administraciones públicas deberían comprometerse a "facilitar y sufragar íntegramente" el plan de jubilaciones y bajas voluntarias.

FINANCIACIÓN

El paso dado por el Gobierno busca buscar transmitir el mensaje de que hay dinero para reestructurar las plantillas, que afectaría al 20% de los trabajadores, unos 1.400 estibadores y que según fuentes cercanas a la patronal costaría unos 575 millones de euros.

Antolín Goya, cara visible de la Coordinadora, ha mostrado su sorpresa ante la disposición del Ejecutivo a sufragar las bajas con dinero público en una cantidad muy superior a los 20 millones de multa que impondría Bruselas.

Si las partes aceptan la propuesta de Fomento, se desconvocaría lahuelga prevista para este viernes y tres días de la semana que viene.

Además, es posible que el PSOE se replantease su voto negativo a la convalidación del decreto que debe realizar este jueves el pleno del Congreso. De momento, PNV y Ciudadanos son más favorables a respaldar al Ejecutivo tras el gesto de acudir a la reunión y hacer una propuesta, y presionan al Ejecutivo a que lo tramite como proyecto de ley para hacer enmiendas, a lo que se resiste Fomento escudándose en la directiva europea.