La expectativa de que Mariano Rajoy pueda ser investido presidente del Gobierno a finales de octubre pone sobre la mesa un nuevo calendario presupuestario que incluye la previsión de que los nuevos Presupuestos Generales del Estado para el 2017 puedan ser definitivamente aprobados en el primer trimestre del año próximo, con efectos retroactivos desde el 1 de enero, según las fuentes oficiales consultadas.
De momento, el calendario presupuestario tiene su fecha más inminente este 14 de octubre. El Consejo de Ministros prevé aprobar este viernes un plan presupuestario del conjunto de las administraciones para el 2017 para cumplir la obligación de enviarlo a la Comisión Europea antes del día 15.
SIN NOVEDADES
Al estar en funciones, el Gobierno solo podrá incorporar en este primer documento las medidas ya en marcha. Para convencer a Bruselas de que España podrá cumplir el nuevo objetivo de déficitdel 2016 (del 4,6% del PIB) el texto explicará el recorte presupuestario de 2.000 millones adoptado en abril (que se prorrogará al 2017), la decisión de adelantar a julio el cierre presupuestario que normalmente sucede en noviembre y los cambios en los pagos a cuenta del impuesto de sociedades para adelantar 8.000 millones de ingresos al 2016.
El ministro de Economía en funciones, Luis de Guindos, ha reconocido que la simple prórroga de estas medidas no bastará para cumplir el objetivo de déficit del 3,1% del PIB del 2017. Corresponderá al nuevo Gobierno adoptar un ajuste de unos 5.500 millones de euros, ya sea subiendo impuestos o cortando gastos.
EL 8 DE DICIEMBRE, FECHA CLAVE
Ese ajuste sí deberá quedar plasmado en el proyecto de Presupuestos Generales del Estado que podría aprobar el nuevo Consejo de Ministros a lo largo de noviembre para su remisión a Las Cortes.
Difícilmente, la aprobación definitiva por el Congreso y el Senado podría producirse antes de acabar el año. Pero el Gobierno ya podrá disponer de un proyecto de ley para presentarlo en Bruselas antes del 8 de diciembre, que es la fecha tope concedida por la CE para conocer las medidas que permitirán situar el déficit español en el 3,1% del PIB en el 2017 so pena de incurrir en un procedimiento automático de sanción de hasta el 0,5% del PIB (5.500 millones de euros).
Lo normal, en todo caso, es que el 1 de enero se prorroguen automáticamente los Presupuestos del 2016 y que en el primer trimestre del 2017 se aprueben las nuevas cuentas. Una hipotética subida de los sueldos públicos tendría efecto retroactivo, desde el 1 de enero. Eso, si avanza la imprescindible negociación parlamentaria. De momento, todos los grupos de la oposición (salvo Ciudadanos) han presentado una iniciativa para una subida de las pensiones del 1,2% que complica la reducción del déficit y que difícilmente será asumida por el PP.
