José Ignacio Goirigolzarri, presidente de Bankia, ha justificado las ventajas de la fusión de esta entidad con el BNM ya que le daría entrada en mercados en los que ahora no está presente. La fusión, "tiene mucho sentido industrial, pero también tiene que haber una lógica financiera" en la operación. El proceso finalizará a mediados del 2017, según ha dicho.

Durante un encuentro informativo sobre el sector financiero organizado por las organizaciones empresariales CEOE y CEPYME, el presidente de Bankia ha querido ser prudente sobre la posible fusión que hace unas semanas comunicó el FROB (fondo de reestructuración y ordenación bancaria) a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). En todo caso, Goirigolzarri ha destacado que aún no han evaluado cómo quedarían las competencias de cada parte en el negocio bancario tras la hipotética fusión.

En lo que sí se ha mostrado tajante ha sido en desmentir o por lo menos no dar por buenas las cifras que se han barajado sobre el impacto que la unión de las dos entidades tendría en el empleo y en el mantenimiento de oficinas. "Nosotros no hemos hecho números", ha remachado.

Como otros miembros destacados del mundo económico y las finanzas a Goirigolzarri le preocupa la situación de provisionalidad política y sobre todo sus efectos en otros sectores. De ahí que haya deseado que "cuanto antes se pueda transformar en algo más estable" la dirección de la CNMV, mejor, tras conocerse que la actual responsable, Elvira Rodríguez, no continuará al frente de este órgano regulador.