El presidente de la Generalidad de Cataluña, Carles Puigdemont, y el vicepresidente y consejero de Economía y Hacienda, Oriol Junqueras, presentan este lunes la culminación del despliegue territorial y competencial de la Agencia Tributaria de Cataluña (ATC). Puigdemont y Junqueras ofrecerán una rueda de prensa conjunta para explicar las funciones de este organismo -cuyo despliegue comenzó hace 18 meses-. Comparecerán junto al secretario de Hacienda, Lluís Salvadó, y el director de la Agencia, Eduard Vilà, en un acto principal de cara a la convocatoria del referéndum de autodeterminación convocado para el próximo 1-O.

Con esta presentación pretenden inaugurar "de una manera simbólica" las 14 nuevas oficinas que la Agència Tributària de Catalunya ha abierto en todo el territorio y que entran en funcionamiento este mismo lunes. Previamente, Puigdemont hará una visita a las instalaciones de la Agencia y mantendrá una reunión con el equipo directivo y el personal que ha participado más directamente en todo el proceso de desarrollo.

Competencias fiscales

El despliegue territorial de la ATC forma parte de la estrategia de crecimiento de la Agencia y responde a la voluntad del Gobierno de la Generalitat de "preparar la administración tributaria catalana para la asunción de las plenas competencias fiscales" tras el anunciado referéndum de independencia del 1 de octubre.

Nuevos impuestos

La Generalitat de Cataluña asumió el viernes la gestión de los impuestos cedidos por el Estado, es decir, el de transmisiones patrimoniales y actos jurídicos documentados, y el de sucesiones y donaciones, una tarea que hasta ahora estaba delegada en los registradores de la propiedad. En octubre del 2016, la ATC anunció que a partir del 1 de septiembre de este año ejercería todas las actuaciones que actualmente le permite el marco autonómico y estatutario en materia de gestión de los tributos cedidos.

Puesta en marcha

Han entrado en servicio las 32 oficinas de atención al público con las que contará la ATC, que empieza con unos 700 trabajadores pero con la previsión de alcanzar los 800 a finales de este año. La ATC deberá asumir los gastos de funcionamiento (personal, alquileres, adecuación de los espacios, servicios generales, entre otros) que conllevará su despliegue territorial. En concreto, la ATC contará con cinco delegaciones (Barcelona, Tarragona, Lleida, Girona y Barcelonés Norte), 14 nuevas oficinas territoriales, y otras 13 oficinas compartidas con entes locales.

Asimismo, Tributs de Cataluña cuenta con 161 oficinas repartidas por toda la comunidad autónoma que no ofrecen todos los servicios pero que tienen un convenio de ventanilla única junto con entes locales como ayuntamientos y diputaciones.

Ahorro

Según cálculos de la Generalitat, los convenios con los registradores de la propiedad tuvieron un coste de 27,5 millones de euros en el 2016, y la previsión para este año era de unos 30 millones, mientras que, paralelamente, el Gobierno catalán paga a la Administración tributaria del Estado cerca de 9,5 millones anuales en concepto de la recaudación vía ejecutiva. La Generalitat argumenta que la asunción de estas competencias y la gestión integrada conllevará un ahorro de 17 millones para la administración catalana.

Junqueras reconoció el pasado jueves que el despliegue de la Hacienda catalana se enmarca en la necesidad de asumir "responsabilidades en impuestos y fiscales", pudiendo sustituir a la actual Agencia Tributaria estatal en caso de una eventual independencia de Catalunya.