El paro convocado este martes en Cataluña ha paralizado el puerto de Tarragona y las empresas químicas funcionan con los servicios mínimos, han informado fuentes de los estibadores y del sector químico. Los estibadores y los remolcadores del Port de Tarragona decidieron en asamblea secundar las movilizaciones, por lo que la actividad del enclave está prácticamente paralizada.

Las grandes industrias químicas funcionan con los servicios mínimos y, de momento, no han registrado incidencias ni la acción de piquetes. Un portavoz de Repsol, en declaraciones a EFE, ha explicado que el cambio de turno se ha hecho con normalidad y que los autobuses de la empresa también han llegado sin problemas a la refinería.

Afectación en Tarragona

Los piquetes han cortado la T-11 (autovía Reus-Tarragona) y los Bomberos han tenido que intervenir por neumáticos quemados en esta vía, foco de un denso humo muy visible desde varios kilómetros. En la ciudad de Tarragona, se ha suspendido el servicio de autobús municipal, ha informado la presidenta de la Empresa Municipal de Transportes (EMT), Begoña Floria, en su perfil de Twitter por estar cortadas las principales arterias.

La Universidad Rovira i Virgili también secunda el paro, las escuelas y los institutos están cerrados y las principales asociaciones de comerciantes secundan esta movilización en rechazo a la violencia policial. El Monasterio de Poblet, habitado por monjes del Císter, se suma a este paro, aunque permitirá las visitas de los grupos cerrados con anterioridad.