Iberdrola ganó 2.421,6 millones de euros en el 2015, un 4,1% más que en año anterior, apoyada en el negocio regulado y en el exterior. Las cifras presentadas a la Comisión Nacional del mercado de Valores (CNMV) cumplen los objetivos marcados en su plan hasta 2016. El resultado bruto de explotación del grupo se sitúo en 7.306 millones de euros, un 4,9 % más que en el 2014, mientras que los ingresos crecieron un 4,6% hasta los 31.418 millones.

La compañía señala que los resultados vienen definidos por el creciente peso de las actividades reguladas (transmisión y distribución) y del negocio renovable, y apunta el impacto positivo de la evolución de dos de las divisas de referencia de Iberdrola, el dólar y la libra, efecto que se ve parcialmente compensado por la pobre evolución del real brasileño.

Por negocios, el ebitda de redes aumentó un 1,9%, hasta los 3.601 millones de euros. En España, que tiene un peso del 40% en este negocio, el ebitda de Redes creció un 0,8%. El negocio de generación y clientes aumentó un 1,2%, hasta los 2.320 millones; y el de renovables creció un 18,6%, hasta los 1.572 millones, animado, entre otros factores, por el aumento de precios del megavatio renovable. Alcierre del 2015, Iberdrola contaba con 46.471 MW instalados en todo el mundo, de los que un 63% produce energía libre de emisiones.

En las cifras del año también pesó la integración de Iberdrola USA con la adquirida UIL y su posterior constitución en Avangrid, operación efectiva desde diciembre y que ha afectado en 60 millones en el ebitda y en 45 millones en el beneficio neto por los gastos asociados al cierre del proceso.

El beneficio neto recurrente del 2015, sin este y otros impactos fiscales, alcanza los 2.261,4 millones euros, un 7% más. En cuanto a la deuda neta del grupo se sitúo en 28.067 millones de euros frente a los 25.619 millones de cierre de 2014 por la compra de UIL.