Iberia ha flexibilizado las condiciones de las tarifas de los clientes con reservas de vuelos a China para que, si lo desean, puedan cambiar o solicitar el reembolso de sus billetes a este destino ante el brote de coronavirus. La compañía, además, está considerando suspender los vuelos con China, como consecuencia del brote viral. La compañía dispone de tres frecuencias semanales entre Madrid y Shanghái en estos momentos. Fuentes de la aerolínea ha apuntado que tienen margen hasta el viernes para tomar la decisión que es cuando tiene que producirse el próximo vuelo a la ciudad China. No obstante, el comité de dirección de la aerolínea estudia este miércoles esa posibilidad.

Las mismas fuentes han explicado que están en contacto con los ministerios de Sanidad, Exteriores e Interior para determinar su actuación ante esta circunstancia. Iberia ha puesto en marcha el mismo protocolo que lleva a cano Air France-KLM que ofrece a los pasajeros que tiene billete a China la posibilidad de cambiarlo o devolver el dinero. la aerolínea francoholandesa ha dejado de volar a la zona en la que se originó el brote vírico. De hecho, el aeropuerto de Wuhan ha sido cerrado y suspendidos todos los vuelos a esa zona.

Este miércoles, la aerolínea británica British Airways, también perteneciente a la matriz IAG, ha anunciado la suspensión inmediata de todos los vuelos con destino y origen en China continental debido al brote de la enfermedad, siguiendo las recomendaciones del Ministerio de Asuntos Exteriores británico.

LIMITAR LOS RIESGOS

La Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) ha señalado que están siguiendo "de cerca" todo lo relacionado con el brote del coronavirus en Wuhan y que colabora con las principales organizaciones sanitarias -como la Organización Mundial de la Salud- para limitar el riesgo del brote.

En un comunicado publicado en su página web, IATA ha explicado que las aerolíneas están preparadas para trabajar con las autoridades de salud pública cuando hay brotes de enfermedades transmisibles.

Además, ha citado las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud, que está tomando medidas para limitar el riesgo de exportación o importación de la enfermedad sin restricciones innecesarias en el tráfico internacional.