La economía española ha empezado el 2019 creciendo a un menor ritmo de lo esperado. En lugar de crecer a un promedio del 2,3% en el primer semestre (como se desprendía de los cálculos del INE publicados en julio), el PIB avanzó el 2,1% en los seis primeros meses. Así se desprende de la serie revisada de la Contabilidad Nacional publicada este lunes por el INE tras haber incorporado cambios metodológicos armonizados en la Unión Europea. También ha sido algo menor la evolución del empleo: En lugar de crecer el 2,5% en la primera mitad del año (como se había estimado en julio), ha avanzado el 2,4%. En total se han creado 423.600 empleos equivalentes a tiempo completo en un año, hasta alcanzar un nivel de 18,313 millones a final de junio.

Según la nueva serie estadística, el PIB creció el 0,5% tanto en el primer trimestre del año (frente al 0,7% estimado con la metodología anterior) como en el segundo (este dato no cambia respecto a la serie vigente hasta la semana pasada). En tasa anual, el crecimiento es del 2,1% en cada uno de los dos primeros trimestres, frente a las tasas del 2,4% y el 2,3% que aparecían en los datos de julio.

La actualización de las tasas del PIB se ha producido tras la revisión completa de la Contabilidad Nacional anual de España entre los ejercicios 1995 y 2018, presentada este lunes.

Los nuevos datos, son menos optimistas y ponen en evidencia que la desaceleración es algo más pronunciada. Además, con la nueva metodología, la estimación de empleo se reduce en casi medio millón, hasta un total de 18,33 millones de puestos equivalentes a tiempo completo. El nuevo punto de partida complica cumplir la previsión del Gobierno, de lograr un crecimiento de la economía del 2,2% en el 2019.