La economía española creció el 2,4% en el 2018, dos décimas menos del 2,6% avanzado en marzo por el Instituto Nacional de Estadística. El INE publicó ayer la revisión de la serie estadística de la Contabilidad Nacional para el periodo entre 1995 y 2018 adoptando cambios metodológicos dispuestos en la Unión Europea e incorporando a sus cálculos los datos estadísticos más recientes.

Según la nueva estimación del INE, el gasto privado solo creció el 1,8% en el 2018 (frente al 2,3% avanzado en marzo), mientras que el consumo público creció el 1,9% (dos décimas menos que lo avanzado). Por su parte, la inversión sorprende al alza, con un incremento anual del 6,1% (frente al 5,6% previo).

El sector exterior restó tres décimas al crecimiento mientras el empleo, medido en términos de puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo, subió el 2,5%. Eso fue en el 2018. Pero a lo largo de los 24 años sujetos a la revisión presentada ayer, hay ejercicios en los que la corrección ha sido al alza y en otros, a la baja.

Como resultado de todo ello, el nivel de PIB en el 2018 es algo inferior a lo que se había estimado antes: en total 1.202.193 millones de euros (unos 6.055 millones menos que en la estimación anterior, el 0,5% menos).

Además, los nuevos datos ponen de manifiesto que la desaceleración de la economía en los tres últimos años ha sido más intensa de lo que se pensaba. También es menor el nivel de empleo: unos 450.400 puestos equivalentes a tiempo completo menos (con datos del 2017)

El método de cálculo de la Contabilidad Nacional empleado por el INE hasta ahora estimaba 17,95 millones de puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo en la economía española. La nueva metodología reduce la cifra en casi medio millón, hasta los 17,5 millones de puestos .

Es difícil explicar por qué desaparecen casi medio millón de puestos de la estadística oficial. En primer lugar, hay que tener en cuenta que la Contabilidad Nacional no solo toma en consideración los registros oficiales (cotizaciones a la Seguridad Social), sino que también extrae conclusiones a partir de la Encuesta de Población Activa (EPA) que, como su nombre indica, es una encuesta (no un registro) y además recoge parte del empleo sumergido que no aparece en los registros oficiales. Por último, La Contabilidad Nacional reelabora los datos para transformar el número de ocupados en puestos de trabajo a tiempo completo.

MENOS EMPLEO, MÁS PRECARIO / Así, con la nueva metodología, el INE reduce a 20.149.300 puestos, el empleo existente en el 2017 (132.000 menos que en la serie anterior). Y al traducir estos puestos a empleos equivalentes a tiempo completo, la cifra pasa de 17,95 a 17,5 millones. Conclusión: hay menos empleo y más precario de lo que se desprendía de la serie anterior.

La actualización de la Contabilidad Nacional es de carácter armonizado dentro de la UE y forma parte de las llamadas «revisiones extraordinarias regulares de las cuentas nacionales».

Los principales cambios afectan ahora a cuestiones como la valoración de la inversión en activos fijos o la cuantificación de la economía sumergida. Fuentes del INE, sin embargo, no lograron precisar si la nueva cuantificación de la economía sumergida suma o resta en el nuevo cálculo del PIB.

Los nuevos datos publicados por el INE también incorporan los habituales ajustes que realiza el instituto cada año sobre los tres ejercicios previos por la adición de nuevas fuentes de información. En este caso, los ejercicios afectados son los de 2016, 2017 y 2018.

Como resultado de ambos factores, el INE estima ahora que el producto interior bruto (PIB) creció el 3,8% en el 2015, dos décimas por encima de lo que daba la serie anterior (3,6%).