La economía española creció el 2% en el 2019, cuatro décimas menos que en el 2018. En el último trimestre del año pasado, el PIB subió el 0,4%, lo mismo que en los dos trimestres precedentes pero una décima menos de lo esperado, según el Instituto Nacional de Estadística (INE). La tasa interanual del PIB se situó en el 1,8%, una décima menos que en el tercer trimestre.

Con ese crecimiento anual, la economía española suma seis años de avances. Aun así, el año pasado esa evolución se ralentizó, siendo la menor alza desde el 2014, cuando el PIB creció el 1,4%. El máximo de este periodo se alcanzó en el 2015, con un crecimiento del 3,8%. Con el último aumento registrado, el PIB acumula ya 25 trimestres consecutivos de alzas.

Según el INE, el crecimiento del 2% logrado en el conjunto del año pasado se debió a una caída de la demanda nacional, cuya aportación fue del 1,5%, frente al 2,6% del 2018.

El empleo, medido en términos de puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo, aumentó a un ritmo interanual del 2% en el cuarto trimestre del pasado año, dos décimas más que suponen la creación en un año de un total de 358.000 puestos de trabajo.