La Asociación de Fabricantes de Coches de China (CAAM) prevé que el mercado del Gigante Asiático, el más importante del mundo por volumen, caerá también en 2020 para sumar, junto a 2018 y 2019, tres años seguidos de descenso tras más de dos décadas de crecimiento ininterrumpido. Según sus estimaciones, en 2020 se matricularán en el país 25,3 millones de unidades, un 2% menos. Esta caída seguirá al 3% negativo de 2018 y al retroceso del 8% que se espera para 2019.

Desde la CAAM aseguran que "aún no hay señales de recuperación" para un mercado que cayó el año pasado por primera vez desde 1990 y en el que hasta ahora confiaban muchas marcas de todo el mundo para compensar la ralentización de los mercados europeos y americanos. No en vano, en China se pasó de comprar 1,58 millones de unidades en 1998 a las más de 25 actuales llegando a máximos de más de 28 millones. La asociación de fabricantes anticipaba a principios de año un repunte a partir del segundo semestre que, finalmente, nunca se ha producido.

Según la CAAM, las principales causas del descenso sostenido de ventas de 2019 son los cambios de normativa, la desaceleración económica y la guerra comercial con Estados Unidos.

Asimismo, el recorte en las ayudas para la compra de eléctricos también ha provocado una ralentización relevante en las ventas de este tipo de coches que, al cierre de septiembre, ya acumulaban un trimestre entero en negativo tras empezar el año creciendo. Pese a todo, compañías como el Grupo Volkswagen, Daimler o BMW siguen invirtiendo grandes cantidades en China y han empezado a producir vehículos eléctricos, como el Audi Q2 L e-tron en caso del Grupo Volkswagen o el Mercedes-Benz EQC, en el país para ampliar sus márgenes. Además, marcas como Skoda siguen apostando fuerte por el mercado chino lanzando vehículos exclusivos como el Kamiq GT.

IMPACTO NEGATIVO SOBRE EL MERCADO GLOBAL

Según datos de LMC Automotive y Jato Dynamics, el mercado global cayó el año pasado empujado por la ralentización del mercado europeo y americano y la primera caída del chino en décadas. Según sus estimaciones, este año volverá a descender dañado también por las tensiones comerciales, los aranceles y la nueva movilidad, que reduce la necesidad de comprar un coche en grandes ciudades.

Pese a las pesimistas previsiones de la CAAM se prevé que en 2020 se vuelva a la senda del crecimiento suban menos de un 1% hasta las 92,1 millones de unidades.