La locomotora franco-alemana vuelve a poner su motor en marcha para liderar a Europa en la búsqueda de una salida a la crisis del coronavirus. Tras semanas de desencuentros y discusiones, París y Berlín anunciaron ayer su disposición a crear un nuevo fondo de reconstrucción para relanzar la economía europea, dotado de 500.000 millones de euros, y destinado a ayudar a los países, regiones y sectores más golpeados por la pandemia del covid19. El Gobierno español calificó de «positiva» la iniciativa franco-alemana. El plan «recoge muchas de las propuestas hechas por España para una salida rápida y solidaria de la crisis, valoró en un comunicado. Además, señalan que el Gobierno espera que la Comisión Europea ponga sobre la mesa una propuesta ambiciosa, que sirva de base para un acuerdo con el que acometer la reactivación económica y social.

Tras anunciar la propuesta, la cancillera alemana, Angela Merkel, dijo que se trata de «un esfuerzo colosal que Francia y Alemania están dispuestos a hacer». «Se trata de una crisis inédita que requiere una respuesta europea», añadió por su lado el presidente francés, Emmanuel Macron, tras la reunión virtual conjunta de ambos líderes.

DESATASCAR El BLOQUEO / La iniciativa pretende desatascar el bloqueo en el que está inmerso el debate presupuestario europeo. Aunque el montante de las transferencias del nuevo fondo de reconstrucción planteado por París y Berlín es inferior al que ha reclamado el Parlamento Europeo -al menos un billón en ayudas no reembolsables- sí contempla algo que hasta ahora había sido tabú y al que algunos socios de la UE, como Alemania, se habían negado en redondo: la financiación del plan a través de la emisión de deuda europea por parte de la Comisión Europea.

La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, acogió favorablemente la «constructiva propuesta» que reconoce la amplitud y el tamaño del desafío económico al que se enfrenta Europa y que pone «el énfasis acertadamente en la necesidad de encontrar una solución con el presupuesto europeo en el centro». Según explicó en un breve comunicado, la iniciativa franco-alemana va «en la dirección de la propuesta en la que está trabajando la Comisión» aunque no ha desvelado si se trata de la cuantía que propondrá el 27 de mayo cuando presente el marco presupuestario para el periodo 2021-2027.

Igual de positivo se mostró el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, que saludó los esfuerzos de Alemania y Francia para encontrar «un terreno común» en el que construir el nuevo fondo de reconstrucción cuya decisión final está en manos de los 27 Estados miembros.

Al igual que Bruselas, Merkel y Macron proponen también vincular el fondo al nuevo marco presupuestario europeo y concentrar los recursos en los primeros años. El nuevo fondo se sumará al bazoka de 540.000 millones de euros en préstamos aprobado por la UE, la flexibilización del marco de ayudas de estado y la liquidez aportada por el Banco Central Europeo.