El Gobierno ha pulsado el botón de arranque del automóvil. La ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto reunió ayer a los representantes del sector y de las comunidades autónomas para dar el primer empuje al plan de impulso de la cadena de valor de la automoción que el ejecutivo presentó hace dos semanas. Este punto de partida sirvió para constituir formalmente la Mesa de la automoción que se encargará de velar por la aplicación y desarrollo del plan, que cuenta con una dotación de 3.750 millones de euros y que tiene como objetivo la recuperación sectorial de la industria del automóvil.

En esta primera reunión participaron, además de la ministra Reyes Maroto, los representantes de las asociaciones del sector de la automoción, Anfac (fabricantes), Faconauto y Ganvam (distribución), Sernauto (componentes), Adevive (vehículo eléctrico) y Anesdor (motos), además de las centrales sindicales (CCOO, UGT-Fica y USO), el secretario general de Industria y Pyme del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, Raül Blanco, y la secretaria de Estado de Energía del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Sara Aagesen. También asistió telemáticamente Thierry Breton, comisario europeo de Mercado Interior.

El directivo europeo destacó la importancia de que el Gobierno se haya implicado fuertemente en impulsar un plan sectorial de este calibre y recalcó que el papel de la Comisión Europea. La propuesta del ejecutivo de Pedro Sánchez se engloba dentro del plan de reconstrucción europeo que contará con 750.000 millones de euros. Una de las partes del plan sectorial de la automoción es la ayuda directa a la demanda, que incluye una partida de 250 millones de euros por parte del Gobierno. Los fabricantes ofrecerán incentivos adicionales por el mismo valor, por lo que el Plan Renove contará con 500 millones para fomentar la adquisición de nuevos vehículos. El Consejo de Ministros aprueba hoy esta partida y llega tras la aprobación del Plan Moves II (100 millones de euros) destinado a ayudas para la adquisición de vehículos eléctricos. Los descuentos para los usuarios que cambien de vehículo a cambio de achatarrar uno antiguo priorizarán los modelos con etiqueta cero y contarán con una ayuda de 4.000 euros. Si se adquiere un vehículo con etiqueta Eco recibirán entre 600 y 1.000 euros, mientras que si se opta por un vehículo con etiqueta C (todos los de combustión) percibirán entre 400 y 800 euros.