El vicepresidente de Nissan Europa, Frank Torres, ha augurado que en el 2025 el 10% de loscoches en el mundo serán eléctricos, frente a una cuota actual de entre el 1% y el 2%, y ha hecho hincapié en la necesidad de que los fabricantes y los gobiernos trabajen de forma conjunta para adaptar la infraestructura de recarga.

Lo ha dicho este martes en una conferencia en el 31 Encuentro de Automoción de IESE en Barcelona, organizado por la escuela de negocios y KPMG. Torres ha considerado que las administraciones públicas no pueden pedir a los fabricantes que se adapten a reducciones de emisiones más severas y no crear el marco adecuado para que se pueda desarrollar una infraestructura que permita que los coches eléctricos sean viables.

El directivo ha hablado también del reto que supone para la industria de la automoción el crecimiento de la propiedad compartida, una realidad que ha asegurado que para Nissan "no es una amenaza, sino una oportunidad". Ha considerado que los constructores de coches deben saber integrar los conocimientos en 'big data' de compañías como Google y Microsoft y no verlos como competidores, así como también con otros nuevos actores como Uber.

CONDUCCIÓN AUTÓNOMA EN EL QASHQAI

En cuanto a la conducción autónoma, ha explicado que Nissan está desarrollando diferentes innovaciones, aunque su visión es que el conductor tenga siempre el control del vehículo, y ha explicado que la primera fase de desarrollo ya se incorporará en el nuevo Qashqai, y permitirá la gestión autónoma en autopista y en un carril.

De cara al 2018 la automovilística japonesa prevé lanzar una segunda fase, que permitirá poder gestionar automáticamente el cambio de carril en autopistas, y en el 2020 estará preparada una tecnología con la que el coche podrá gestionar automáticamente las intersecciones dentro de las ciudades, aunque ha remarcado que esta fase necesita un trabajo conjunto con las autoridades.