La tasa de desempleo en Estados Unidos continuó disminuyendo en julio, a pesar de que se crearon menos empleos que en junio debido al resurgimiento de casos de covid-19, que ha obligado a cerrar tiendas y restaurantes en muchos estados.

La economía estadounidense creó 1,8 millones de empleos en julio, muy por debajo de los 4,8 millones de empleos agregados en junio, dijo el viernes el Departamento de Trabajo. De hecho, la reanudación de la actividad se ralentizó por la propagación del virus en gran parte del país. Muchos estados como California, Texas y Florida han tenido que cerrar las puertas de comercios que habían reabierto unas semanas antes.

La tasa de desempleo, en tanto, sigue bajando: pasó del 11,1% en junio al 10,2% en julio. Ahora se ubica lejos del 14,7% de abril, pero aún está muy por encima del 3,5% de febrero, el nivel más bajo en 50 años.

Sin embargo, el Departamento de Trabajo afirmó que algunos trabajadores continúan siendo mal clasificados en la encuesta, y que la tasa de desempleo habría sido un punto más alto de lo reportado.

Esta tasa "probablemente no disminuirá mucho" antes de las elecciones presidenciales del 3 de noviembre, "y el desempleo se mantendrá cerca del 10%", anticipó Ian Shepherdson, economista jefe de Pantheon Macroeconomics.

La tasa de desempleo de julio para los trabajadores negros, del 14,6%, sigue siendo mucho más alta que la tasa nacional y muy superior a la de los trabajadores blancos, del 9,2%. Entre los hispanos, la tasa de desempleo es del 12,9%, en baja respecto al 14,5% de junio pero también por encima de la tasa nacional.

El presidente Donald Trump, que aspira a la reelección, celebró la noticia. "Grandes cifras de empleo!", tuiteó.