La Policía Nacional ha desmontado una banda de gestores que planeaba lucrarse presentando falsos expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) en 50 empresas ficticias.
La trama había creado en Murcia hace años esas empresas sin actividad. Su plan ahora era beneficiarse de las ayudas fiscales y prestaciones que palían el efecto de la crisis del coronavirus.
La operación policial sigue abierta. Ya han sido detenidos tres socios de una gestoría de Murcia capital.
Los agentes estuvieron durante meses siguiendo la pista de las actividades de los investigados. Desde julio pasado, la Policía vigilaba su creación de empresas fantasma. Con ella contrataban, a cambio de dinero, a inmigrantes que obtenían así un número de Seguridad Social y derecho a prestaciones.
La red falseaba también contratos de alquiler, con los que los empleados acreditaban arraigo ante la Seguridad Social.
La epidemia y su crisis habían abierto una ventana de negocio para esta fábrica de contratos falsos. La red planeaba a llevar a todos sus contratados a erte, aprovechando la gran acumulación de trabajo en las oficinas de empleo. La operación policial comenzó este lunes con dos registros, en los que se ha intervino abundante material informático y documental de la trama.
Además, los agentes intervinieron cerca de 15.000 euros en efectivo, además de ordenadores, tablets y teléfonos.
En estos momentos la investigación policial continúa abierta, la UCRIF de la Jefatura Superior de Murcia, así como el Juzgado de Instrucción Nº 8 de los de Murcia que entiende del caso, continúan investigando en torno a la documentación intervenida en los registros, con la intención de localizar a los testaferros de las empresas, cómplices, beneficiarios, así como todos que hayan tenido o tengan algún tipo de relación criminal con la organización.
