La compañía Puig cerró el ejercicio 2017 con máximos de rentabilidad. La compañía logró unas ventas netas de 1.935 millones de euros en el pasado ejercicio, el 8,1% más (8,6% más a perímetro constante), con un beneficio neto atribuido de 228 millones de euros, el 47% más.

“Es verdad que no hemos llegado al objetivo de facturar 2.000 millones que nos habíamos marcado hace tres años, pero un crecimiento del 18% en tres años es un crecimiento muy importante y muy superior al del sector, y nos hemos quedado muy cerca”, ha destacado Marc Puig, presidente y consejero delegado de la compañía, este jueves en la sede de la firma en l’Hospitalet de Llobregat.

La compañía ha destacado que el 85% de las ventas proceden de fuera de España, y que el crecimiento ha sido similar en todas las zonas: 7% en España, 8% en los mercados desarrollados y 9% en mercados emergentes. Los principales mercados de la firma (España, EEUU, Francia y Reino Unido) han crecido, en especial Estados Unidos, donde las ventas se han incrementado en dos dígitos gracias al lanzamiento de Good Girl (Carolina Herrera) y Prada, ha destacado el directivo.

La firma abrió nuevas filiales en Colombia y Australia, y están a punto de abrir Malasia y Tailandia.

Puig contaba a cierre del 2017 con 4.472 empleados, el 39% de ellos en España.

FUTURO

A principios de marzo del 2018, Christian Louboutin y Puig se asociasen a nivel mundial para crecer en el mercado de la belleza de lujo (“ahora es cosmética, pero queremos ampliar en fragancias”). En cuanto a perfumería, Puig ha incrementado su participación alcanzando la mayoría del capital en Eric Buterbaugh (EB Florals).

En el 2018, a perímetro constante, la empresa espera un crecimiento de las ventas superior al 5%, si bien el impacto negativo del tipo de cambio y una nueva norma contable implicarán que las ventas cierren "planas", ha dicho Puig.

La ambición de la firma es crecer hasta los 3.000 millones de euros de facturación en el 2025. “Ello implica crecer el doble que el mercado”, ha dicho Puig.

REVOLUCIÓN TECNOLÓGICA

Sobre el cambio de hábito de consumo, Puig ha remarcado que pese a que las personas cada vez se relacionan más a través de canales electrónicos, “la categoría de fragancia no está en declive”, ha destacado, que ha citado que hay que seguir aportando “sorpresa, hacer soñar al consumidor” e innovando.

Puig también ha lanzado Puig Futures, una apuesta tecnológica y de innovación de la compañía para “conseguir la mejor experiencia de consumo, las marcas más adaptadas a este nuevo escenario y los itinerarios de compra más convenientes”. Según el consejero delegado, el impacto tecnológico en fragancias ha sido hasta ahora “limitado”, pero llegará. Por ello, apostarán por la “innovación en el área digital”.

Por ello, la empresa apostará por crear “desde cero” nuevos productos y marcas. “No lo hemos hecho desde hace tiempo, y creo que es el momento”, ha dicho. Además, seguirán invirtiendo en terceros (han realizado una inversión minoritaria en la firma publicitaria Seedtad) y también explorarán “partenariados tecnológicos” con otras empresas. Un ejemplo es AirParfum, una compañía en la que Puig ha tomado la mayoría y que elabora un dispositivo tecnológico que permite al consumidor probar decenas de perfumes sin que se sature el olfato.

Además, la firma seguirá explorando la venta digital. Actualmente se realiza a través de las páginas de los clientes y de algunas marcas con tienda propia. "Seguiremos explorando. La venta por internet ya representa una parte importante. Estamos haciendo varias pruebas, y actualmente las ventas son de un dígito. Creemos que en el 2020 la penetración digital de la categoría será de dos dígitos", ha dicho Puig.