Repsol, junto a su filial Petronor y el Ente Vasco de la Energía (EVE), prevé construir en Bilbao una de las mayores plantas del mundo de producción de combustibles a partir de CO2 e hidrógeno verde en colaboración con el gigante petrolero Saudi Aramco como socio tecnológico, así como una planta de generación de gas con residuos urbanos, según anunció ayer el consejero delegado de la compañía española, Josu Jon Imaz. Ambas instalaciones, ubicadas en Bilbao, supondrán una inversión inicial de unos 80 millones de euros y entrarán en funcionamiento en el año 2024.

La energética, que avanza en su objetivo de alcanzar las cero emisiones netas en el 2050, señaló que estas inversiones suponen un ejemplo de la necesaria colaboración público-privada para «afrontar retos como el de la lucha contra el cambio climático».

El primer proyecto, en el que se invertirán 60 millones de euros, y que tiene como socio tecnológico a Saudi Aramco, supone la construcción de una de las mayores plantas de producción de combustibles sintéticos con cero emisiones netas del mundo a partir de hidrógeno verde. La instalación, que estará totalmente operativa en cuatro años, será una referencia en Europa, a juicio de Repsol. El segundo proyecto, que se situará junto al primero, supondrá una inversión inicial de 20 millones de euros, liderada por Petronor, y consistirá en una planta de generación de gas a partir de residuos urbanos.