La aerolínea irlandesa Ryanair ha rechazado las declaraciones de la Asociación Europea de Pilotos (ECA, por sus siglas en inglés) en las que califica de "declaración de guerra" el recorte de capacidad anunciado por la compañía y califica de "falso" que el cierre de dichas bases sea un "castigo" por las continuas huelgas de los trabajadores de la compañía en varios países europeos.

Para la compañía, el cierre de dos bases de Ryanair en Eindhoven y Bremen y la reducción de 5 a 3 aviones en Niederrhein es una "respuesta sensata al deterioro del mercado" como consecuencia de los altos precios del petróleo y las tarifas aéreas decrecientes. Y señala a otras aerolíneas que asegra que también cerraron algunas bases por este mismo motivo, como Easyjet (dos aviones en la base de Oporto), Norwegian (Belfast y Edimburgo), Lufthansa (Dusseldorf) o Wizzair (Poznan).

"La ECA y los sindicatos de pilotos estuvieron callados cuando Lufthansa, Wizzair y Norwegian cerraron sus bases o redujeron sus programaciones. También cuando Small Planet y Primera cayeron en bancarrota hace pocas semanas, causando pérdidas de cientos de trabajos. El cierre de Eindhoven y Bremen y la reducción de 5 a 3 aviones en Niederrhein es pequeño pero necesariao para responder a estas circunstancias adversas", precisó en un comunicado el director de marketing de la compañía, Kenny Jacobs.

LA BASE DE IBIZA

En el año 2016, la compañía irlandesa abrió una base estacional en Ibiza, es decir, que funcionaría únicamente desde abril hasta octubre. A los trabajadores de la compañía en la isla (actualmente 21) se les destina en los meses de invierno a otras bases para que no pierdan el empleo durante ese tiempo (cinco meses), algo que no ha ocurrido este año, según denunció a EL PERIÓDICO uno de esos trabajadores, un tripulante de la compañía con base en Ibiza.

"A mitad de verano nos solían dar una lista de tres bases y nosotros elegimos una como primera opción. Este año no nos han dado nada, le preguntábamos a nuestros supervisores y siempre nos decían que estaban muy ocupados con las huelgas. Hace unas semanas nuestro supervisor nos dijo que eligiésemos bases y nos recomendó las más grandes porque tendrían más posibilidad de vacantes. Pedimos Barcelona y Madrid, y los que son italianos Bérgamo (Milán)”, explicó a EL PERIÓDICO este trabajador que prefiere no desvelar su nombre.

Hace una semana les dijeron que estaba confirmada su asignación de plazas en estos destinos, tal y como habían pedido, sin embargo, todavía no les aparece en la programación y según les han dicho este lunes "el proceso está congelado debido a cartas y amenazas". Este trabajador cree que la compañía se refiere a una carta del sindicato Sitcpla a la compañía y un artículo en el Diario de Ibiza en el que se habla del "desamparo de los trabajadores", según explicó. El resultado es que dos semanas antes de que Ryanair deje de partir desde Ibiza (27 de octubre) sus 21 trabajadores en la isla no saben si se quedarán sin trabajo o les será asignada otra base.

Preguntada a este respecto la compañía dice que Ryanair opera 5 rutas domésticas hacia y desde Ibiza durante la temporada de invierno (con tripulación de otras bases) y 27 rutas nacionales e internacionales en verano. No obstante, no responde sobre la situación laboral de sus trabajadores.