E n torno al 10% del gasto familiar en bares y restaurantes pasó al sector de la distribución y el comercio alimentario durante la pandemia en el 2020. Ese factor es el que facilitó en gran medida que todas las cadenas mejorasen sus resultados y que el sector en su conjunto elevase el pasado año las ventas en valor el 12,7%, y el 10,7% en volumen, según la consultora Kantar.

Según datos del Ministerio de Agricultura, el 13,9% del consumo de total de alimentos y bebidas se hizo fuera del hogar en el 2019. El 18% en el caso de los alimentos. Con la pandemia, esos porcentajes se redujeron drásticamente durante el confinamiento y en los meses posteriores, con las restricciones de apertura. El crecimiento en volumen de las ventas de supermercados e hipermercados corresponde en gran parte a ese trasvase, según admitió ayer el director del área Retail de Kantar, Florencio García .

Según los datos de Kantar, el esfuerzo promocional de las enseñas ya se ha incrementado, especialmente a cargo de Lidl, Carrefour, Dia y Aldi. Principalmente con descuentos en segunda unidad de entre el 50% y el 70%. «No es un impacto de caída de precios generalizada ni los consumidores notan que gasten menos», explica García, «pero sí esperamos ver descensos en las próximas semanas».

El sector de la distribución español está muy atomizado pero al mismo tiempo dibuja líderes claros. El líder del sector es Mercadona, con una cuota de mercado según Kantar del 24,5%, seguida a distancia por Carrefour, con el 9,4%; Lidl, 6,1%; Dia, 5,8%; Eroski, 4,8%; Alcampo, 3,4%; y Consum, 2,8%. Por primera vez Lidl llega al tercer puesto. Pero en todas las autonomías en los tres primeros puestos hay algún líder regional.

El director general de la patronal de supermercados Asedas, Ignacio García Magarzo, considera que introducir el concepto guerra de precios es «muy desafortunado, ya que alimenta la idea errónea de que los distribuidores hacen movimientos injustificados para perjudicar a la cadena de valor o los ingresos de los proveedores». En su opinión, en tiempos de pandemia «es más difícil hacer promociones», ya que los consumidores tienden a estar menos tiempo haciendo la compra o comparando precios. Lo que predomina en estos momentos es la proximidad del punto de venta, añade, y eso explicaría en parte el dinamismo de las cadenas regionales y del comercio tradicional en los últimos meses.

Según datos de Kantar, el comercio de proximidad que engloban las cadenas regionales y los especialistas suponen el 38,1% de la cuota de mercado en valor. El comercio tradicional atrae una cuarta parte de las ventas. Eso explicaría las razones por las que Lidl ha logrado situarse en tercer lugar del ránking español. El pasado año la cadena alemana inauguró 43 nuevas tiendas, con una inversión de más de 240 millones de euros. La mayoría de esas nuevas tiendas se situaron en núcleos urbanos. Aldi también apostó por las aperturas, ya dispone de 330 tiendas, y prevé abrir 40 este 2021, la mayoría urbanas o de proximidad.