Uno de los objetivos de José María Álvarez Pallete a su llegada a la presidencia de Telefónica era reducir la gigantesca deuda que arrastra la compañía. Y tres años después de entonces, el ritmo que lleva la sitúa en los 38.700 millones de euros, 13.800 millones menos que cuando el actual dirigente tomó las riendas. En los últimos meses, la venta de activos de la compañía ha producido un recorte de deuda de más de 2.300 millones de euros.
A junio de 2016, la deuda neta financiera se situaba en 52.568 millones de euros, mientras que a cierre del primer trimestre se encuentra en 40.377 millones de euros, 693 euros menos que a finales de 2018. La generación de caja libre (1.408 millones) y las desinversiones financieras netas, principalmente por la venta de Antares a Catalana Occcidente por 161 millones y Telefónica Guatemala (139 millones), son los principales motivos, según apunta la compañía en la presentación de sus resultados del trimestre.
Por contra, los factores que incrementan la deuda son la retribución al accionista (46 millones de euros), los compromisos laboral (239 millones), así como otros factores por un importe neto de 570 millones de euros.
Además, si se incluyen eventos posteriores al cierre del trimestre, como la venta de otras filiales en Centroamérica a Milicom y América Móvil, la reciente venta de los centros de datos al fondo Asterion por 550 millones de euros y el cheque de 702 millones de Hacienda por impuestos pagados en exceso, la deuda se reduciría en 1.700 millones más, hasta situarse en alrededor de los 38.700 millones de euros. No obstante, a esto habría que añadir la nueva norma de arrendamientos que asciende a 7.439 millones de euros, lo que elevaría la deuda hasta los 47.820 millones.
UN 10% MÁS DE BENEFICIOS
El primer trimestre de 2019 ha sido muy bueno para la compañía. Telefónica logró un beneficio neto en los tres primeros meses de 926 millones de euros, un 10% más que en el primer trimestre de 2018. No obstante, los ingresos se redujeron un 1,7% hasta los 11.979 millones de euros, debido al efecto de las divisas pues su crecimiento en términos orgánicos fue del 3,8%.
El resultado bruto de explotación (Oibda) alcanzó los 4.264 millones de euros (un 10,3% más que en el primer trimestre de 2018) debido a la adopción de la norma contable NIIF 16 (+414 millones), la plusvalía por la cesión de derechos futuros asociados a una cartera de reclamaciones (+103 millones), las plusvalías netas por la venta de compañías (+86 millones fundamentalmente Antares), los gastos de reestructuración (-47 millones) y el ajuste por hiperinflación en Argentina (-22 millones). Excluyendo estos impactos, el Oibda subyacente asciende a 3.730 millones de euros en el trimestre (-3,9% interanual).
Por otra parte, la evolución de los tipos de cambio ha tenido un impacto negativo en los resultados reportados de Telefónica, principalmente por la depreciación frente al euro del peso argentino y del real brasileño. Así, en el primer trimestre de 2019 las divisas reducen en 4,9 puntos porcentuales el crecimiento interanual de los ingresos y en 4,7 puntos porcentuales el del Oibda.
