El secretario general de UGT, Josep Maria Álvarez, ha augurado que el 2018 "será un año de alta conflictividad" "si los empresarios no entran a repartir las riquezas que se generan en las empresas a través de los convenios colectivos" y "si el Gobierno no da respuesta a las demandas" de la ciudadanía. Así lo ha señalado este jueves a preguntas de los periodistas sobre las peticiones de cordura a la patronal por parte de las organizaciones y la posibilidad de la puesta en marcha de movilizaciones, algo que ha dicho estimar "con toda seguridad" si no se dan esas condiciones.

Álvarez ha defendido que "ha llegado la hora de empezar a repartir la riqueza" y "no solo porque da más bienestar a muchas personas sino que, además, genera más riqueza" porque supone crear más consumo y más puestos de trabajo. Precisamente sobre este asunto ha versado su intervención en Foro Jaén Debate con la conferencia 'Tiempo de recuperar derechos'. Ha hecho hincapié en que "un país que crece como España, que empieza a salir de la crisis" y donde se está generando mucha "es el momento" de recuperarlos, "tanto desde la perspectiva social", en materia pensiones, salud, educación, servicios sociales o dependencia, como en lo que se refiere a los salarios.

"A pesar de tres años seguidos de crecimiento económico, lo salarios no crecen. Los rendimientos del capital doblan y en algunos casos hasta multiplican por seis el crecimiento de los rendimientos del salario y por eso UGT ha planteado que este año es el de la recuperación y con ese ánimo afrontamos los próximos meses", ha asegurado.