El Juzgado de lo Mercantil número 1 de Madrid ha fallado a favor de los usuarios en la demanda colectiva interpuesta por la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) contra Volkswagen por el escándalo conocido como Dieselgate, destapado en 2015, y que suponía la instalación en los vehículos de motor diésel del grupo de un programa informático que falseaba las emisiones de gases contaminantes, camuflando sus verdaderas condiciones y simulando el mantenimiento de unos niveles de elevada potencia y consumo reducido.

Según informa la OCU, el juez ordena al grupo automovilístico a que "cese en esta conducta, le prohíbe su repetición en el futuro, y le obliga a la reparación de todos los vehículos afectados, mediante la modificación, de manera gratuita, del software instalado o cambio de hardware si fuera preciso". Además, reconoce una indemnización a los consumidores afectados miembros de la OCU por "daños y perjuicios causados" de 3.000 euros por afectado, ascendiendo el monto indemnizatorio total a 16.332.000 de euros.

Esta sentencia aún no es firme: contra ella se puede interponer un recurso de apelación, por lo que hay que esperar 20 días procesales, según ha informado la organización que tilde de "gran noticia" para los consumidores este fallo y una gran victoria para OCU y para los miles de socios de la organización. "Al fin se ha hecho justicia", aseguran.

La organización defendía que Volkswagen reconoció en su día que manipuló el resultado de las emisiones contaminantes y, por tanto, según la entidad, debía compensar económicamente a los consumidores afectados, tal y como hace en EEUU. En dicho país, la compañía ha acordado pagar entre 4.070 y 8.140 euros por afectado. Así, después de un intento fallido de conciliación, en octubre de 2019 tuvo tuvo lugar la audiencia previa del caso y finalmente la vista oral de la demanda se celebró el pasado 17 de febrero de 2020, cuando quedó visto para sentencia.