La empresa alemana Volocopter ha cerrado un acuerdo con el gigante automovilístico chino Geely Holding para financiar la producción en serie de taxis voladores y su comercialización en China. Las primeras inversiones alcanzarán, según la empresa, los 50 millones de euros. Geely Holding y Volocopter formarán una sociedad de riesgo compartido para llevar la movilidad aérea a China en un proyecto en el que además participarán otros inversores europeos, asiáticos y americanos.
La financiación se utilizará para el desarrollo del taxi aéreo VoloCity para que el producto pueda salir al mercado en tres años. Volocopter, además, ya ha iniciado conversaciones con otros inversores para impulsar el proyecto, por lo que los analistas ven el proyecto muy viable.
La empresa desarrolla taxis aéreos cuyo despegue es completamente vertical, como el de los helicópteros, y que funcionan con motores eléctricos, por lo que son silenciosos y utilizables en entornos de alta densidad de población. Volocopter fue fundada en el 2011 y ha invertido hasta ahora 35 millones de euros en el desarrollo de los taxis voladores, de los que ha hecho varias demostraciones. "La movilidad urbana tendrá que evolucionar en los próximos años para satisfacer la demanda. Con nuestros taxis voladores ofrecemos una nueva forma de movilidad en el aire", dijo el CEO de Volocopter, Florian Reuter.
"La nueva financiación nos permite impulsar con más dinamismo la realización de la movilidad aérea urbana y seguir manejando con sentido el dinero de nuestros inversores", agregó. Geely Holding será un inversor más, al lado de otros como Daimler, mientras que los accionistas mayoritarios seguirán siendo los fundadores Stephan Wolf y Alexander Zosel.
Geely Holding subrayó el potencial estratégico de la alianza con Volocopter para llevar al mercado chino la movilidad aérea urbana. "Geely está pasando de ser un fabricante de automóviles a ser un grupo de movilidad tecnológica, que desarrolla tecnologías de futuro e invierte en ellas", dijo el presidente de Geely, Li Shufu.
