Los máximos históricos de Wall Street del viernes pasado gracias al buen dato de empleo se han seguido dejando sentir en la sesión de este lunes, en la que ha habido pocas referencias. Los inversores han hecho poco caso a la caída de las exportaciones en un 4,4% y de las importaciones en un 12,5% en China en julio, ahora que se cumple justo un año de que las dudas sobre la desaceleración de su economía arreciasen. El incremento de la producción industrial en Alemania en un 0,8%, una décima más de lo esperado, ha compensado los posibles efectos negativos de los datos chinos. Los bancos han sido los que más alcistas y siguen recuperando el terreno perdido tras los test de estrés. El Ibex 35 ha subido el 0,27%, a los 8.562,5 puntos.
