El president de la Generalitat, Ximo Puig, y la líder de la oposición, la popular Isabel Bong, se enzarzaron ayer en una discusión a cuenta del Fondo de Liquidez Autonómico (FLA).

El jefe del Consell informó de que el Gobierno central ya ha activado esa partida para la Comunitat, lo cual «permitirá la inyección de 700 millones de euros para pagar a miles de proveedores valencianos». «Es una buena noticia para miles de familias y empresas valencianas», subrayó el dirigente, quien explicó que esta semana tanto él mismo como el conseller de Hacienda, Vicent Soler, mantuvieron distintas conversaciones con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para perfilar esta medida.

Por su parte, la popular Bonig pidió al president que explique «qué recortes ha tenido que realizar su gobierno» para obtener el visto bueno del ejecutivo. La líder del PPCV recordó que el Ministerio de Hacienda «dijo que condicionaba estos fondos a que la Generalitat presentara un plan de ajuste de 1.500 millones de euros como consecuencia de los 1.300 millones ficticios que el Consell ha estado poniendo en sus presupuestos».

«Le pedimos que haga público qué partidas en materias como educación, sanidad, bienestar social e infraestructuras se verán afectadas» para acceder al beneplácito gubernamental, manifestó la líder del Partido Popular.