Críticas en València a otros partidos, silencio en Castellón con los casos propios. El líder de Ciudadanos (Cs) en la Comunitat, Toni Cantó, criticaba ayer que el PSPV «mantenga a personas imputadas en sus listas municipales», en referencia al alcalde de Rocafort, Víctor Jiménez, mientras mantiene en su grupo en Les Corts a Cristina Gabarda, que acaba de ser condenada por injurias graves al popular Miguel Barrachina. En un acto celebrado en Vila-real, la secretaria de organización de la formación naranja en Castellón, Sandra Julià, reiteró que el partido no prevé tomar medidas contra Gabarda.

Pese a que los estatutos de Cs obligan a los representantes institucionales y los cargos orgánicos a poner su cargo a disposición del comité ejecutivo «si resultara acusado por la Fiscalía por la comisión de cualquier delito», la dirección provincial del partido no prevé actuar en el caso de la ahora diputada autonómica. Julià se escudó en que el código ético que firman los candidatos (actualizado el pasado febrero) sí distingue entre delitos, y que son solo los que tienen que ver con infracciones graves los que obligan al partido a apartar a los investigados.

Entre estos asuntos, la secretaria de organización destacó los casos de presunta corrupción, prevaricación o los vinculados a delitos contra las personas como la violencia de género. En cambió, calificó de «tontería» la pena contra Gabarda, quien anunció que recurrirá la sentencia después de que un juez la condenara por las injurias a Barrachina, al que en un post de Facebook acusó de corrupto. Además, Julià aseguró que si el PP «sigue dando importancia a estas cuestiones es para erosionar a Cs», algo que vinculó a sus malos resultados en las urnas.

En el acto de Vila-real en el que Julià hizo estas declaraciones participaba el candidato al Parlamento Europeo, Jordi Cañas, que en el 2014 sí se apartó de la primera línea política al ser imputado. Entonces fue vinculado con una factura falsa firmada antes de ostentar cargos públicos en un caso por el que finalmente fue absuelto, lo que provocó su regreso a la política. Los procesos judiciales de Cañas y Gabarda evidencian que no todos los casos se tratan igual en la formación.