Javier Ferrer fue reelegido ayer como alcalde de Traiguera, aunque con la paradoja de que no estuvo en su propia elección. El socialista se ausentó por causa mayor, al estar ingresado en un hospital, y prevén realizar un acto de proclamación, con los discursos protocolarios, próximamente.

El pleno de investidura de la nueva corporación municipal duró poco más de 15 minutos. En el mismo, los cinco ediles presentes del PSPV apoyaron a Ferrer, mientras que los tres del PP respaldaron a su candidato. El propio primer edil destacó por las redes sociales: «Un imprevisto no me permite prometer el cargo de concejal ni tampoco ser proclamado en persona munícipe. Espero que sea un trámite hospitalario corto».