Compromís volvió a apostar por la plaza del Huerto de los Corderos para su acto central de la campaña de las municipales en Castelló, como ya hiciera con la presentación de su candidato a la alcaldía, Ignasi Garcia, hace menos de dos meses. Como en aquella ocasión, el calor fue el protagonista junto al dirigente de una coalición valencianista que defiende los «éxitos» del gobierno del Pacte del Grau, pero insiste en considerarlos frágiles, por lo que pide el voto para su formación para reeditar ese acuerdo, pues cree que «queda mucho por hacer».

Garcia, que ya presentó su programa el pasado martes, se centró más en reivindicar la necesidad de apostar de nuevo por un equipo de gobierno progresista que en lanzar propuestas novedosas. En este sentido, advirtió de que la labor realizada en la última legislatura «es bastante frágil y está siendo amenazado por la tríada de corruptos, señoritos y extremistas», al tiempo que pidió que no vuelva «la oscuridad de Costa, Camps y Fabra». «Compromís somos la garantía de las políticas progresistas, somos los únicos que vamos a seguir trasformando Castelló en la ciudad que todos queremos, pero solo lo podremos hacer con vuestro apoyo», añadió.

Pese a reconocer que queda «mucho trabajo por hacer», Garcia manifestó que en los cuatro años de ejecutivo progresista «hemos recuperado una ciudad para las personas, que trabaja por el bienestar de la ciudadanía y empieza a ser garantía de derechos y oportunidades para todos y no solo para los privilegiados».

CIUDAD DE DERECHOS // El alcaldable de Compromís aseguró que Castelló es ya un municipio comprometida con la educación y el feminismo, al tiempo que defendió que se ha puesto en marcha una «revolución cultural» que le sitúa «a la altura de cualquier capital». Cara al futuro, destacó que en breve se creará una oficina LGTBI «que trabajará por la diversidad y no discriminación de este colectivo». También puso en valor la propuesta de crear una Oficina de Atención a la Dependencia «para que quien necesite de estos recursos lo tenga más fácil y sea atendido con humanidad».

PUGNA EN LA IZQUIERDA // Si Garcia y el diputado autonómico Vicent Marzà abordaron en sus discursos la necesidad de seguir construyendo mayorías progresistas, la portavoz de Compromís, Mònica Oltra, sí apostó por un discurso más agresivo con sus socios del PSPV y, a la vez, rivales electorales por el flanco izquierdo. «A algunos se les ha acabado acabado el mensaje del miedo y no tienen ya discurso de voto útil, porque el voto útil es el del orgullo y se lo das a aquellos que no te defraudan, y ese es el voto a Compromís». Asimismo, la vicepresidenta del Consell reivindicó a la coalición valencianista como el motor del cambio en el 2015, cuando «los moderados del centro político estaban apoltronados en la oposición».