En la Vall d’Uixó nunca antes el espectro político había aparecido tan fragmentado en unos comicios municipales. En la campaña electoral que se inició la pasada medianoche participaron más candidatos a la alcaldía que nunca en democracia, en especial, por lo que respecta a las opciones de derecha, donde el Partido Popular tendrá que pelear sus votos con hasta tres agrupaciones más: Ciudadanos, CCD y Vox.

En contrapunto, las fuerzas de izquierdas --PSOE, EU, Compromís i Som la Vall-- se enfrentan a una única incógnita, saber si el resultado de las autonómicas y generales tendrá su traslado en las locales y quién se beneficiará o saldrá perjudicado entre las que han integrado el tripartito los últimos cuatro años.

MISMOS OBJETIVOS / La actual alcaldesa, Tania Baños, no dudó en afirmar que el PSOE presenta «la mejor lista en esta ciudad» y defendió: «Salimos a ganar y ser la fuerza más votada, como en las elecciones nacionales y autonómicas». A su vez, anunció que la campaña seguirá «la línea de proximidad» que ya han «llevado a cabo durante estas semanas».

Por su parte, Carolina Castelló que, a título personal, vivió su primera pegada de carteles, afirmó que, a pesar del panorama que ha tenido que encajar el Partido Popular en las anteriores votaciones, la lista que encabeza afronta estas jornadas «con muchísima ilusión, pensando en el futuro de la Vall». Serán dos semanas «a pie de calle, puerta a puerta, barrio a barrio», porque están «centrados en las necesidades reales de los vecinos», dijo.

Mientras, en Compromís esperan poder «consolidar» su presencia «en el Ayuntamiento y seguir rescatando personas», como incidió Fernando Daròs. El candidato de EU, Antoni Llorente, recordó que «la gente demostró el 28 de abril que tiene claro lo que se están jugando y que el tiempo de las mayorías absolutas ya se ha acabado», puntualizó.