El cambio de ciclo alcanzó anoche a la Diputación de Castellón, cuyo gobierno perdió el PP después de 24 años de mantenerlo de forma consecutiva desde 1995, de modo que el PSPV volverá a presidir el palacio de las Aulas y podrá hacerlo con su socio Compromís o bien con Ciudadanos (Cs), que también suma.

El secretario provincial del PSPV en Castellón, Ernest Blanch, mostró su «satisfacción» por esta victoria de su partido, mientras que el presidente del PPCS, Miguel Barrachina, felicitó a los vencedores, si bien reivindicó que el PP es el partido que más alcaldías tiene en la provincia.

En cuanto a las cifras en la Diputación, según los datos proporcionados anoche por los distintos partidos, los socialistas suman 12 diputados, el PP se queda en 11; y Cs y la coalición nacionalista conservan sus dos asientos en el pleno. La clave de la victoria para el PSPV ha estado en el partido judicial de Llucena, donde el acopio de voto útil, procedente en buena parte de Compromís, logrado por el PSPV en l’Alcora (mayoría absoluta para Samuel Falomir) y también en Atzeneta.

Además, los socialistas han obtenido cinco diputados de Castelló; tres de Nules; dos de Vinaròs; y el de Morella. Por su parte, los populares han bajado hasta cuatro en la zona de la capital, han sumado dos del área de Nules y han logrado hacerse con uno de Vinaròs y con los diputados de Segorbe, Sant Mateu; Albocàsser y de Viver. En todo caso y tal y como estaba previsto, las diferencias han sido muy ajustadas y el PP se ha quedado a solo unos cientos de votos de lograr el duodécimo escaño, en el mencionado partido de Lucena.

En cuanto a Compromís y Ciudadanos obtienen sus escaños del partido judicial de Castelló. Por su parte, el PSPV se habría quedado, a falta de confirmar todos los números, a solo tres votos de arrebatar a Compromís uno de sus dos diputados, de modo que podría llegar a sumar el décimo tercero al final del recuento.