En Burriana se ha repetido el éxito socialista de otras grandes ciudades de la provincia de Castellón. Tras cuatro años no exentos de polémicas en el seno del pacto entre PSPV-PSOE y Compromís-Podemos, la alcaldesa, Mª Josep Safont se ha quedado a un solo concejal de obtener la mayoría absoluta que le habría permitido gobernar en solitario.

El resultado de las elecciones municipales, pese a quedarse a las puertas de los once representantes, es satisfactorio para la candidatura que lidera la actual munícipe porque «los vecinos han valorado el trabajo que hemos realizado durante estos cuatro años, en los que los seis concejales socialistas nos hemos dejado la piel», no dudó en afirmar.

Frente a los 4.152 votos que le dieron 6 concejales en el 2015, en las elecciones de ayer el PSPV-PSOE ha registrado 1.755 votos más, lo que le ha supuesto abrir las puertas del pleno municipal al número 10 de la candidatura.

A sus socios de gobierno no les ha ido tan bien. Compromís se ha quedado en 1.437 apoyos (9,49%), frente a los 2.190 que obtuvo hace cuatro años y si bien Safont necesitaría un pacto para seguir gobernando en mayoría, el abanico se ha abierto y las posibilidades son ahora de lo más diversas.

PREMIO A LA GESTIÓN / Es pronto para hablar de nuevas coaliciones. Así lo precisó la actual alcaldesa, quien afirmó que «lo que tenga que pasar, pasará. De momento vamos a descansar, porque hemos trabajado mucho» y es hora de celebrar «este premio al trabajo bien hecho».

Existen varias opciones. El PSPV podría plantearse gobernar en minoría como fuerza más votada alcanzando acuerdos puntuales, o cabría la posibilidad de revalidar su acuerdo con Compromís, aunque no sería descabellado que se llegara a algún tipo de acuerdo con Ciudadanos, como ya pasara en otros municipios.

Cualquier afirmación en estos momentos no deja de ser pura especulación. Para María Josep Safont lo importante ahora es que los votantes «han valorado al partido, pero también el trabajo». A su vez, manifestó su deseo de seguir impulsando una gestión que en la recta final de la legislatura ha dejado «proyectos en marcha o en vías de finalizarse que se podrán culminar para plantear nuevas iniciativas».

En el caso de Burriana resulta muy significativa la irrupcion en el pleno de Vox, con dos concejales, posiblemente una de las razones por las que el Partido Popular de Juan Fuster ha perdido uno de sus ediles. De hecho, entre los 1.187 apoyos a la candidatura de Juan Canós, pueden estar los 802 que ha perdido Fuster.