La compra y descascarado de almendra centra la labor que desarrolla Frutos Secos del Maestrazgo (Frusema), una empresa familiar que además complementa su actividad de cada día dando soporte y asesoramiento a los agricultores, al tiempo que presta otros servicios relacionados con el cultivo de la almendra. Los productos que comercializa la firma son la almendra en grano y también la cáscara de almendra.

Por lo que respecta a la comercialización del producto, destina una parte de sus ventas al pequeño comercio entre panaderías y consumidor final. Y en lo que afecta a la comercialización de la cáscara de almendra, en su mayoría la venta se realiza a granel, en grandes volúmenes, destinada finalmente a biocombustible.

Asimismo, en el año 2015 Frutos Secos del Maestrazgo rediseñó su página web (www.frusema.com), integrando a la misma la venta on line, lo cual les permite llegar al consumidor final directamente en el ámbito nacional.

Mención especial merece la importancia que Frusema otorga al compromiso social. De hecho, la firma entiende la responsabilidad social como «la mejora de la calidad de vida de nuestra área de influencia», puntualizan desde la compañía, apostando por personal y proveedores locales, respeto absoluto al medio ambiente y participando en actividades socioculturales.

claves del éxito // La dirección de la empresa tiene muy claro que marcar la diferencia en calidad y servicio es fundamental. Desde el inicio de su andadura Frusema ha apostado por ofrecer un servicio de proximidad al agricultor basado en el beneficio mutuo y conseguir un producto de calidad excelente. Todo ello con criterios que se aplican desde el inicio de la producción hasta que llega al consumidor final, de forma que las claves de su éxito se asientan en un sistema de calidad basado en la profesionalidad y compromiso con las personas.

La compañía está inmersa en un proceso de ampliación de las instalaciones para incrementar la producción y facilitar el día a día de usuarios y personal. Ha renovado el cerramiento exterior de la fábrica y ha habilitado una nave central de almacenamiento. En la zona de personal también ha renovado los vestuarios y el área destinada al descanso.

El compromiso medioambiental de Frusema va más allá de una simple declaración, teniendo en cuenta que trabajan directamente con productos del campo. Algo que se pone de manifiesto en el consumo responsable y la adecuada gestión de residuos. Al tiempo, desde la empresa proporcionan información al agricultor sobre la sostenibilidad de los campos en cuanto a la reducción de residuos y adopción de un sistema de trabajo minimizando la erosión. Un cuidado medioambiental que tiene su inicio trabajando con el agricultor desde la siembra hasta la puesta del producto en el mercado.

EL COMIENZO // Los inicios arrancan ya en el año 1960 por dos agricultores para dar servicio de recogida y descascarado durante la campaña de la almendra. Trabajaban los dos agricultores, sus esposas y dos operarios. Desde entonces la evolución en plantilla y tecnología ha sido constante.