La crisis de 2008 provocó que hasta 160.000 empresas salieran al exterior en busca de la demanda que caía dentro del mercado español. Ese ejercicio de supervivencia realizada por los empresarios españoles provocó un vuelco en nuestra balanza de pagos y aceleró la salida de dicha situación. Para dimensionar dicho esfuerzo, desde 2010 el número de empresas españolas que exporta se ha incrementado un 40%. Nuestros destinos naturales han sido la Unión Europea, Latinoamérica y norte de África. En estos momentos, para continuar este proceso de internacionalización de nuestras empresas es fundamental que aumente su tamaño.

Las políticas públicas deben ir encaminadas a facilitar este proceso, abriendo nuevos mercados, incrementando la competencia doméstica, mejorando tanto la regulación en el mercado laboral, como el funcionamiento de las instituciones, el acceso a la financiación y el capital humano de la sociedad, tanto de empresarios como trabajadores.

La digitalización puede ser una palanca especialmente importante para lograr todo lo anterior. De hecho, el comercio exterior es más seguro y más rápido si es digital. Ya estamos viendo cómo la digitalización avanza y aporta confianza en la transacción. Se están consiguiendo nuevas soluciones de pago que conllevan inmediatez y trazabilidad. Esto implicará la sustitución de medios de pago más tradicionales de tipo documentario, vigentes desde el siglo XIX, por soluciones digitales on line.

También estamos viendo cómo se incorporan a nuestro día a día nuevas formas de acceso a mercados para nuestras empresas (plataformas, canales, e-commerce, marketplaces, portales…)

Desde BBVA queremos dar soluciones a nuestras empresas apoyando este proceso y nuestros esfuerzos van encaminados en cuatro vías:

-Acceso a la financiación: ayudando a la empresa en el crecimiento de tamaño indicado, con maneras eficientes de financiar.

-Cubriendo las necesidades de nuestros clientes de mitigación de riesgos que lleva implícitos el comercio exterior (comercial, tipo de cambio y riesgo país)

-Invirtiendo en tecnología que ponga a disposición del cliente nuevas soluciones digitales.

-Asesorando personalmente a las pymes en este campo y ofreciendo soluciones a medida a empresas de mayor tamaño.

Digitalización

La digitalización permite avanzar en los tres primeros puntos. En primer lugar, avanzamos en soluciones que permiten una financiación on line a través de canales electrónicos, consiguiendo la empresa anticipar los ingresos de sus exportaciones y financiar los pagos de sus importaciones sobre la marcha.

En segundo lugar, mitigamos los riesgos del comercio exterior facilitando soluciones digitales de instrumentos y medios de pago que reducen los riesgos comerciales y riesgos país de sus contrapartes. También damos la posibilidad de coberturar por el canal digital los riesgos inherentes a transacciones realizadas en divisas distintas al euro.

En el tercer punto, hemos avanzado permitiendo que nuestros clientes puedan realizar pagos internacionales con inmediatez y trazabilidad de los mismos a través de tecnología Swift.En este punto, cabe destacar que BBVA es la primera entidad española en poner Swift GPI a disposición de sus clientes corporativos. Este tipo de transferencia permite que los fondos puedan usarse el mismo día que se realiza el pago; y ,por otro lado, facilita el seguimiento del mismo, incrementando la eficiencia de la tesorería y mejorando la relación entre proveedores y empresas.

Prácticamente el 100% de las transacciones se puede digitalizar y se avanzará en los próximos tiempos en disponibilidad de las garantías de manera digital.

Por último, en BBVA creemos que estos avances en el mundo digital deben ser complementados con un asesoramiento personalizado. Mantenemos un asesoramiento a medida para las pymes. Bien on line, de manera rápida y ágil para necesidades sencillas (elección de medio de pago, capacidad exportadora, radar de mercados,…), o mediante un gestor especializado en soluciones de comercio exterior más complejas.

Por otro lado para las empresas de mayor tamaño, tenemos un amplio equipo de especialistas repartidos físicamente en nuestras oficinas de Empresas y Corporaciones que ponen a disposición de las mismas las soluciones a medida que necesitan en las distintas fases del proceso de internacionalización: venta de productos y servicios, acceso a licitaciones y proyectos en otros países o implantación en el exterior. Al ser una entidad de carácter multinacional destacamos en soluciones crossborder dentro de las geografías en las que mantenemos presencia con los distintos bancos del grupo (Méjico, Latinoamérica, EEUU, Turquía...). Desde las más sencillas (apertura de una cuenta) hasta las más complejas (financiación en la implantación).

Para las empresas españolas el negocio internacional es una necesidad. Resulta complejo a las que se inician y para las experimentadas se les presentan oportunidades en las que es clave un buen asesoramiento. BBVA ayuda a sus clientes con valor añadido y compaginando operativa on line y trato personalizado.