Becsa está llevando a cabo la construcción de una nueva nave industrial en Vila-real para la empresa del sector cerámico Vidres, que, de este modo, ampliará su espacio industrial.
El proyecto que está llevando a cabo la empresa de Castellón incluye tanto la construcción de una edificación industrial como la urbanización de las calles Turia y Figueroles. La ejecución de la urbanización de las calles adyacentes a Vidres empezó en febrero y se prevé que finalice en agosto. En este caso, lo más destacado es la ejecución de una galería subterránea, que une las naves existentes con la nueva nave industrial que se está construyendo paralelamente. No obstante, el proyecto finalizado para Vidres tendrá que esperar hasta septiembre.
La nueva nave industrial está formada por un único módulo y se concibe para dar cabida al almacenamiento de productos cerámicos. Esta infraestructura se dotará de iluminación natural mediante lucernarios, lo cual será una medida más de eficiencia energética que se aplica actualmente en obras de este carácter. Dispondrá de puertas de acceso y evacuación, y muelles de carga. Para conseguir impedir la entrada de agua en el nuevo espacio industrial, este se encontrará ligeramente elevado respecto a la urbanización exterior.
cargas de contenedores
El nuevo almacén automatizado para la preparación de cargas de contenedores ocupa una nave que supera los 4.000 m2 de superficie bajo cubierta. «El sistema informático del almacén controla los movimientos de las mercancías hasta que son enviadas a la zona de expediciones. Este sistema tiene identificados todos los palés, las existencias de cada referencia así como su posición en la estantería. Esto permite garantizar una perfecta trazabilidad de la totalidad de las mercancías», señalan desde Vidres.
