Conseguir crear hogares saludables y más eficientes enérgicamente es el gran objetivo de C&C Bioconstrucción.

La firma, que opera en distintas sedes en el extranjero, está irrumpiendo en el sector de la construcción por su innovador modo de trabajo y la calidad de los materiales que utiliza.

Eporis, impermeabilizantes, autonivelantes decorativos, microcementos, poliuretanos y selladores son algunos de los principales revestimientos cementosos que emplea la empresa. Entre estos, destaca el microcemento, un material idóneo tanto para exterior como interior, aplicable en suelos, techos, paredes, etc y que no necesita juntas.

Además, ofrece un extenso abanico de posibilidades, donde el límite lo pone la imaginación de cada cliente, ya que tiene un sinfín de texturas, colores y acabados de barnices. El microcemento también cuenta con un sistema de insonorización muy notorio que lo hace uno de los productos estrella de la firma.

El aislamiento con el exterior es uno de los atributos que busca C&C en sus construcciones y por ello, desarrolla el innovador sistema SATE. Un recurso de rehabilitación de fachadas que posee demostradas ventajas como la obtención de un ahorro energético en torno al 50%, la revalorización del inmueble, ya que se puede conseguir un certificado energético mejor en la tasación o la eliminación de microorganismos que puedan facilitar la entrada de humedad.

La importancia del acabado es otro de los objetivos vitales de la compañía en sus construcciones. De hecho, para este año se han propuesto «enfocar la actividad un poco más a la decoración, focalizando más aún la importancia que tiene el aspecto visual en el resultado final para el cliente», explican desde la empresa.