El Corte Inglés cumple este mes 12 años en la capital de la Plana como un proyecto «plenamente consolidado en la ciudad», según manifiesta Pau Pérez Rico, director regional de comunicación. De hecho, ha actuado como catalizador para la creación de una zona de comercios a su alrededor, junto al parque Ribalta. La existencia, por ejemplo, de un conocido establecimiento de comida rápida y de varios bares junto al recinto así lo atestigua. «A esto ha ayudado sin duda nuestra presencia», indica Pau Pérez Rico.

Claro que en el mismo centro de la ciudad la actividad comercial continúa, aunque es cierto que los negocios solicitan más colaboración desde el Ayuntamiento para poder impulsar su actividad. En concreto, solicitan mejores accesos y más facilidades para aparcar. Así lo manifiesta la responsable en Castellón de la Confederación de Comerciantes y Autónomos de la Comunitat Valenciana (Covaco), Tere Esteve.

También los representantes vecinales advierten sobre el cierre de comercios. Francisco Cabañero, presidente de la Confederación de Asociaciones de Vecinos, propone «dar bonos para los principales párkings». Por su parte, Inma Roig, de la AAVV Raval de la Trinitat, destaca el «deterioro que sufren los barrios con locales sin utilizar».

Otro espacio que se puede convertir en un polo para el comercio es el Recinto de Ferias y Mercados de Castellón. Su gestora, Refeyme --que ha salido del concurso de acreedores--, ha propuesto al Ayuntamiento varias acciones, como celebrar los miércoles por la tarde otro mercado, similar al de los lunes, y convertir el recinto en un escenario. «Es una instalación que muchas ciudades querrían tener», indican desde la sociedad.