El apoyo a entidades que realizan labores de ayuda social a los colectivos más desfavorecidos de la provincia o con mayores barreras para encontrar un trabajo es uno de los objetivos centrales de la Diputación. Por ello, ha subvencionado a una decena de asociaciones humanitarias con una aportación de 200.000 euros, una cifra que se traduce en centenares de personas beneficiadas.

Este es el caso de la Fundación Alzheimer Salomé Moliner, que realizará un taller de formación para cuidadores de personas con la enfermedad. Por otro lado, la Fundación Amigo ha elaborado el Proyecto Insola, para orientar y formar a personas en tratamiento por problemas adictivos, para lograr su inserción laboral.

La iniciativa Vives Emplea Plana Alta busca contribuir a la inclusión profesional de personas en riesgo de exclusión social. Por ello, la Fundación Acción Contra el Hambre ha diseñado un itinerario formativo, que tendrá lugar en el Grao, en el que se adquirirán las habilidades y competencias para encontrar empleo.

La asociación Casda ha presentado una acción para mejorar la empleabilidad de las personas con el VIH en riesgo de exclusión social a través del empleo.

Por su parte, el proyecto Preocupa’t, liderado por Caritas Diocesana de Segorbe-Castellón, desarrolla de un taller prelaboral de servicios a la comunidad, bajo la metodología del aprendizaje-servicio.

Asimismo, Cocemfe Maestrat ha propuesto unas jornadas formativas para personas con diversidad funcional, así como para profesionales y/o especialistas en contacto con el colectivo.

La Diputación colabora con la Fundación Síndrome de Down en el programa de inserción, asesoramiento y orientación.