Las cámaras de comercio valencianas acaban de abrir sus procesos electorales para la renovación de sus órganos internos de dirección. En este contexto y con la publicación del censo, la Cámara de Comercio ha iniciado una cuenta atrás en la que la actual presidenta, Dolores Guillamón, se postula para la reelección, una vez que ha logrado revertir la complicada situación económica de la entidad. Reconoce que le mueve el apoyo institucional, la confianza empresarial y el respaldo de los empleados, de lo que hace gala esta popular empresaria castellonense del ámbito hotelero, la primera mujer que preside esta corporación en sus más de 117 años de historia.

-Ángel Báez: ¿Qué le lleva a plantearse optar a la reelección ?

-Dolores Guillamón: Pues la verdad, la confianza de que aún puedo seguir aportando cosas positivas a esta Cámara; la satisfacción de ver que todo el esfuerzo que hemos empleado para dar la vuelta a las cuentas han tenido el fruto que queríamos. Ha sido un esfuerzo enorme porque la situación a la que nos enfrentábamos era muy compleja. La crisis hizo mella, la supresión de las cuotas nos abocó a grandes cambios; tuvimos que renovar nuestras estructuras. Hoy, sin lanzar las campanas al vuelo, podemos decir que estamos en el buen camino. Además, tengo la enorme satisfacción de contar con la confianza de todas las instituciones públicas, del apoyo del tejido empresarial y de aquellos profesionales que, día a día, ha compartido conmigo las inquietudes y los anhelos de mejora.

-A. B.: Pero, según suele decir, no se prevé que este nuevo periodo sea un camino de rosas...

-D. G.: Las dificultades nunca me han echado para atrás. Todo lo contrario, me motivan para trabajar más. Nunca lo he tenido fácil y tampoco soy de las personas que huyen de las responsabilidades y del esfuerzo.

-A. B.: Desde su posición, cómo ve la situación que se vive actualmente en Cataluña y cómo puede afectar o afecta a Castellón.

-D. G.: Este tema me entristece mucho. Hay que tener en cuenta que Cataluña y Castellón son dos sociedades, culturas, unidas hasta el tuétano. Tenemos objetivos e intereses comunes y la fractura no nos lleva a nada. La situación ha hecho que empresas, especialmente Pymes, comiencen a informarse sobre la posibilidad de establecerse en nuestra provincia. En circunstancias normales le diría que esto es una buena noticia; pero ya me gustaría que no fuera de este modo.

-A. B.: ¿Cuántas empresas catalanas se han interesado en cambiar su negocio a Castellón?.

-D. G.: No tenemos más datos de lo que ofrece el ministerio, de lo que vamos conociendo por los cauces oficiales. Lo que sí puedo decir es que hay profesionales y pequeños negocios interesados en establecerse en Castellón, de diferentes sectores, en el caso de que el conflicto territorial, al que nos ha llevado las decisiones del Govern catalán, se mantiene. Espero que se reestablezca el sentido común, ese seny que tanto nos gusta de los catalanes, a quienes tantas cosas nos unen y tan pocas cosas nos separa.

-A. B.: Últimamente, usted ha pisado el acelerador en cuanto a las reivindicaciones de las infraestructuras para Castellón...

-D. G.: Es lo que hay que hacer porque nos jugamos mucho. Por ejemplo, la puesta en marcha del corredor es fundamental no porque nos coloque en situación de ventaja al resto de nuestros competidores, sino porque nos sitúa al mismo nivel que ellos. Le diré que, en igualdad de condiciones, los castellonenses somos más competitivos que nadie. Los hechos lo demuestran. Hoy, un sector como el azulejo es puntero en Europa, aun teniéndolo peor que otros países para exportar. Tener unas buenas comunicaciones favorece a la industria, pero sobre todo al tejido económico; esto es, la creación de riqueza y el empleo.

-A. B.: ¿Cuál cree que es la fórmula para lograr una pronta llegada del Corredor?.

-D. G.: No tengo ninguna varita mágica, pero todo tiene que venir a través de la unidad. Palabra clave. Es la que nos ha permitido avanzar. Y sobre todo, tener claro que a este primer esfuerzo debe venir otro dirigido a sacar el máximo rendimiento a estas infraestructuras. Pasa aquí y pasa con el aeropuerto de Castellón, que hay que reforzar las medidas para sacarle partido. Tenga en cuenta el potencial que tendríamos con un Corredor de este calado, con un aeropuerto ya en marcha y un puerto que bate récords en tráficos de mercancías. Si a esto le unimos la mejora de una red de carreteras, tendríamos mucho hecho para mejorar nuestro tejido económico.

-A. B.: Las exportaciones castellonenses han vuelto a despuntar. ¿Cómo lo valora?.

-D. G.: Pues le diré que no me soprende cuando hablamos de un sector como es el azulejero, auténtico motor del desarrollo económico de la provincia. El comercio exterior y el turismo han sido durante los años de crisis un perfecto salvavidas para los castellonenses. Hemos crecido fuera más que nunca y estamos recibiendo más turistas. Ahora la demanda interna parece despegar. Estamos en un momento de recuperación que debemos aprovechar, pero sin bajar la guardia y actuar siempre con seny.