Indusal aprovechó Cevisama para mostrar sus últimas incorporaciones técnicas. La gran novedad fue su planta de pruebas de micronizado. Tal y como detallan desde la empresa, la instalación «se aporta a nuestros clientes para hacer las pruebas de molturación, lo que permitirá determinar si el proceso resulta técnica y económicamente viable». Además, el equipamiento posibilita determinar los parámetros de operación que son más óptimos de proceso, así como el posterior diseño y construcción de la planta escala industrial.

Según añaden por parte de Indusal, las instalaciones piloto «están dotadas de equipos para poder realizar ensayos en molienda, clasificación y eficiencia energética», así como desarrollar tests de utilización de las materias primas necesarias, para verificar las previsiones del proyecto en cuanto a cifras de producción y calidad. La mercantil dispone a la vez de un laboratorio de alta tecnología, dotado con un equipo analizador de tamaño de partículas por difracción láser.

«También somos especialistas en el sector portuario, donde realizamos proyectos básicos y constructivos, con mecanizado de terminales de graneles sólidos, con la consiguiente fabricación de transportadores portuarios de altos rendimientos», revelan.

materias primas

Desde sus inicios, Indusal es una aliada de las firmas del ramo, ya que acompañan los procesos relacionados con el tratamiento de las materias primas con las que después se hará la fabricación de unos productos de calidad reconocida a nivel internacional. Con sede en Vila-real, cuenta con una amplia gama de máquinas para la preparación de pastas cerámicas, como molinos de vía húmeda, molturación en seco, secaderos rotativos, agitadores o filtros de prensa. Cada departamento, como ingeniería, administración, compras, montaje o producción, están conectados fuertemente para lograr la mejor gestión.

«Ofrecemos a nuestros clientes desde el inicio del proyecto hasta el final, lo que se conoce como llave en mano. Esta estructura nos permite ir de la mano durante todo el proceso que comporta un proyecto industrial desde los comienzos, colaborando conjuntamente en el proceso de implantación o anteproyecto, pasando por todas las etapas de la ejecución hasta la entrega de la instalación», destacan.

La compañía, que dispone de unas instalaciones de 6.500 m2 totalmente equipadas, tiene como uno de sus principales valores añadidos la cercanía de su departamento Técnico en la fase del diseño del proyecto, que sumado a una gran gama de equipos industriales ofrecen diversas soluciones al margen de las instalaciones completas.

«El 2019 ha representado la eclosión de nuestra empresa a nivel industrial, en la que nos hemos posicionado como una importante ingeniería mecánica, acometiendo proyectos de envergadura tanto para el sector de las materias primas como para el sector cerámico. La previsión para este año es continuar con el crecimiento que llevamos y consolidar los proyectos en cartera».