A lo largo de la historia de la humanidad la exposición a contingencias de origen natural o antrópico que provocan situaciones de desastre y emergencias de diferente magnitud es una realidad. De hecho, en determinadas ocasiones la sensación es que parece que vivamos en una “sociedad de riesgo”, dado que, a pesar de la puesta en marcha de medidas de seguridad y de mitigación, no siempre es posible evitar dichas situaciones de crisis. Esta última aseveración, sin embargo, no puede ni debe inducir a la inquietud o al desasosiego, es fundamental que la aceptación de la posibilidad de una situación de emergencia o desastre se produzca con naturalidad inteligente de forma que, las personas en general, ya sean profesionales de los cuerpos de primera respuesta, expertos de la salud mental o población civil en general, se preparen y se formen para hacer frente a la eventual incidencia de situaciones potencialmente traumáticas.

Dado este contexto, el Observatorio Psicosocial de Recursos en Situaciones de Desastre (OPSIDE), área de trabajo de la Oficina de Cooperació al Desenvolupament i Solidaritat del Vicerectorat d’Internacionalització, Cooperació i Multilingüisme de la Universitat Jaume I, lleva 10 años impulsando estas actividades formativas y de prevención a la vez que gestionando proyectos de naturaleza institucional para replicar este servicio pionero en España en otros contextos internacionales. Desde sus comienzos y con la necesaria colaboración de profesorado especializado, se han gestionado cursos de formación en atención psicosocial en desastres, resiliencia en contextos educativos, etc…

Este decenio de trabajo en el OPSIDE ha sido posible gracias a que la Universitat Jaume I se ha implicado por este trabajo en prevención y formación psicosocial en desastres desde un punto de vista institucional. Actualmente, tanto las instituciones como los profesionales o las organizaciones que intervienen en emergencias y desastres incluyen y consideran la importancia de la atención a la salud mental como cuestión prioritaria en sus actuaciones en emergencias, la UJI ha sido pionera en la preocupación por ofrecer medidas o instrumentos de prevención y paliativos, a través del OPSIDE, que posibiliten la asistencia psicosocial en emergencias y desastres tanto dirigida a la población afectada como a los profesionales, quienes se ven expuestos a altas demandas emocionales para desempeñar su trabajo.

En estos diez años, además, siguiendo la estrategia de internacionalización de la UJI, el OPSIDE ha logrado implantar una red de observatorios relativos a recursos en atención psicosocial en desastres y emergencias desde el punto de vista preventivo en diferentes lugares de Latinoamérica como son Nicaragua, Colombia y, en la actualidad, Chile, siempre desde un punto de vista institucional. En Nicaragua se trabaja paralelamente con la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua, UNAN-León, donde se creó el OPSIDE-UNAN-León en 2009 con el objetivo de proporcionar formación, asesoramiento, apoyo psicosocial y recursos a los diferentes sectores de la población (voluntarios, estudiantes, organizaciones, instituciones, profesionales) con el fin de prepararlos para una respuesta eficaz. Además, de estas cuestiones, a diferencia del OPSIDE-UJI, en la UNAN-León sí que se realiza intervención ante emergencias con un grupo de personal voluntario formado por el observatorio dadas las características de especial riesgo de catástrofe natural de la zona. Por su parte, en Colombia se cuenta con el OPSIDE- UdeA de la Universidad de Antioquia con idéntico objetivo, aunque en este caso se trabaja fundamentalmente con población afectada por el desplazamiento forzado debido a la situación de conflicto armado que sufre este país, ninguna generación de colombianos conoce lo que es vivir la paz, han nacido en un contexto de guerra y sus relaciones están intervenidas por estos procesos de violencia, es por esto que la propulsión en la reconstrucción del tejido social es una evidente y real necesidad. En la actualidad, se están iniciando conversaciones con la Universidad Playa Ancha de Chile para la implantación de un nuevo OPSIDE que contribuya a la prevención de la salud mental ante la ocurrencia de desastres. La creación de esta red ha sido posible gracias a la gestión técnica de convenios y proyectos institucionales subvencionados por la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo y la Generalitat Valenciana, entre otros agentes.

Además, en el propio contexto de la UJI, el OPSIDE es un área de trabajo a disposición de la comunidad universitaria en general y, en particular, del estudiantado que, por ejemplo, recibe el apoyo económico para realizar sus prácticas curriculares en el programa Prácticas Solidarias en Países Empobrecidos de la propia universidad, el OPSIDE elabora el protocolo de formación y, en su caso, atención a realizar tanto antes de la estancia como tras retorno; esta formación permite dotar al estudiantado que se desplaza de herramientas básicas en cuanto a la implementación de primeros auxilios psicológicos en sus propias actividades personales y profesionales durante su estancia, así como para afrontar situaciones complejas en el desarrollo de su concreto plan de prácticas siempre con las suficientes garantías psicosociales teniendo en cuenta la complicada realidad cotidiana de los países de destino.

La gestión de la formación para la atención integral de las personas y para que el afrontamiento de situaciones de crisis, la diligencia en el estudio de la resiliencia, la recuperación tras la exposición a sucesos de emergencia es una realidad consolidada en la estructura de la UJI que puede contribuir, desde un punto de vista institucional, a la consecución de sociedades más seguras, eficientes y preparadas y celebrar así futuros aniversarios del OPSIDE. H

*Directora de la Oficina de Cooperació al Desenvolupament i Solidaritat (OCDS) del Vicerectorat d’Internacionalització, Cooperació i Multilingüisme de la Universitat Jaume I de Castellón