Las economías más avanzadas del mundo se distinguen por hacer un mayor uso del conocimiento en sus actividades productivas. Son lo que se denominan economías intensivas en conocimiento, con un emprendimiento innovador, tecnológicamente avanzado y una fuerte orientación internacional, lo que les permite competir con garantías en un mercado global y abierto. Son también las que vienen incorporando cada vez más en su desarrollo respuestas a preocupaciones sociales como la sostenibilidad, la solidaridad y la cohesión social y territorial; es decir, evolucionando hacia una economía más inteligente y con valores.

En este contexto, las universidades desempeñan un papel central como proveedoras de conocimiento y de formación en valores. La educación superior, la investigación y la transferencia del conocimiento que desarrollan son instrumentos clave para avanzar en una economía del conocimiento que, además, debe atender bien a las nuevas demandas sociales para favorecer un verdadero desarrollo humano. De ahí que se dé una importante correspondencia entre las economías más desarrolladas y el grado de desempeño de sus sistemas universitarios en sus actividades académicas.

Es algo que hemos visto en algunas de las mayores economías, como en EEUU y Canadá y, también, en distintos países de la UE. No es casual que la UE, hace ya años, a finales del siglo pasado, iniciara el llamado Plan Bolonia para conformar el Espacio Europeo de Educación Superior y que, actualmente, y en el marco del Horizonte 2020, iniciara la Estrategia RIS3 para impulsar un desarrollo económico basado en una especialización inteligente, sostenible e integradora, donde las universidades son, junto con las compañías, actores esenciales para su logro.

En este sentido, es de una gran oportunidad e interés una reflexión compartida sobre los importantes retos sociales y económicos que afronta el mundo iberoamericano y lo que puede significar un Espacio Iberoamericano del Conocimiento que, desde la cooperación interinstitucional, sirva de catalizador de muchas de las actividades que en ese orden pueden y deben desarrollar nuestras universidades. Y que ello les ayude a mejorar en su servicio a la sociedad.

Con este fin, el 15 y 16 de julio de este año, la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (Crue Universidades Españolas), que este año celebra su XXV aniversario, junto a la Fundación Conocimiento y Desarrollo (CyD), y contando con la valiosa colaboración de la Universitat Jaume I (UJI) de Castellón, organizan en Benicàssim unas Jornadas bajo el título El Espacio Iberoamericano del conocimiento. Contribuciones de la universidad a una economía avanzada y sostenible en la región.

EN ESTE ENCUENTRO participarán varias rectoras y rectores de importantes universidades iberoamericanas que abordarán la cuestión en tres mesas redondas en las que se hablará de la contribución de estas a través de su desempeño académico, mediante las tres grandes misiones de la universidad hoy (docencia, investigación y transferencia del conocimiento), y que contará también con la intervención de la secretaria general iberoamericana, Rebeca Grynspan, quien impartirá la conferencia de clausura.

SIN DUDA, este encuentro nos permitirá conocer mejor, reflexionar y debatir acerca de los importantes retos que supone para el crecimiento de los distintos países que componen la comunidad iberoamericana el avance en la economía del conocimiento. Y de cuales deben ser las contribuciones que, desde su desempeño académico, las universidades pueden aportar.

Todo ello, sin olvidar que al igual que ya sucedió cuando se planteó ese mismo debate en Europa, las universidades deben sentirse comprometidas con un crecimiento económico inteligente y con valores; es decir, sin olvidar que este debe ser sostenible e integrador.

Una vez más, Benicàssim, gracias a la valiosa ayuda y colaboración de la UJI de Castelló (que agradecemos, y mucho, así como la implicación en el desarrollo de las Jornadas de su rectora y amiga, la profesora Eva Alcón), se convierte en un importante punto de encuentro y debate universitario, que seguro nos llevará a interesantes y oportunas conclusiones que nos permitirán avanzar más y mejor en la ansiada conformación y desarrollo de un verdadero Espacio Iberoamericano del Conocimiento, desde el que seguro se fortalecerán las contribuciones de las universidades al progreso de los pueblos de Iberoamérica.

*Coordinadores de las jornadas