La única política que entiendo es la de estar centrado en las personas, con proximidad y participación de todos los vecinos. Y el trabajo conjunto con el resto de administraciones para aunar esfuerzos y solucionar problemas. Y esto, ni más ni menos, es lo que nos han quitado a los ondenses. Para imponernos la política del odio. Nunca ha sido mi estilo contestar a los ataques de quienes están en política solo para destruir pero en mi ciudad me entristece el bajón impuesto por la coalición cuatripartita de Huguet. Sin gestión, sin ideas, en una siesta gris de la que tan solo despiertan para insultar y mentir.

Por eso, en lugar de criticar las cero inversiones de la Generalitat para este año, lo único que hacen es atacar con mentiras a la Diputación. El gobierno provincial ha ingresado en la cuenta corriente del Ayuntamiento de Onda más de 300.000 euros, en los últimos 10 meses, a través de 14 subvenciones diferentes. Entre las que destacan 147.876,96 euros en un plan de empleo a final del 2015, que el Ayuntamiento (con el voto en contra del cuatripartito) ha rechazado para este año o las ayudas a los libros, que por cierto la mitad de familias aún no han recibido. En mi ciudad hoy se acumulan los problemas: se recortan las ayudas municipales a jóvenes, mayores y personas dependientes, se eliminan los planes de empleo, se bloquea el turismo. Onda vuelve a su etapa más gris, aquella que destruía puestos de trabajo y perdía la ilusión y las oportunidades. Espero que vuelva el sentido común y que entre todos, muy pronto, desterremos las políticas del odio y volvamos a avanzar por el camino correcto. H

*Portavoz del PP en Onda