Para lograr un proyecto de ciudad, se requiere un conjunto de ideas planificadas, coordinadas y orientadas a satisfacer las necesidades más urgentes de los ciudadanos.

Como en todo proyecto, existen cuatro etapas o fases: diagnóstico, diseño, ejecución y evaluación.

El diagnóstico establecerá las necesidades insatisfechas actuales y futuras, la existencia de potencialidades o recursos no aprovechados que pueden optimizarse y mejorar, o complementar o reforzar otras actividades o proyectos.

El diseño valorará las opciones, tácticas y estrategias a seguir, siendo la etapa donde nace el proyecto y donde se realiza la planificación operativa, que es el proceso que prevé los recursos y los plazos.

La ejecución consistirá en poner en práctica la planificación realizada previamente.

Por último, la evaluación, será la etapa final del proyecto, y en la que éste será revisado y se llevarán a cabo las valoraciones pertinentes sobre lo planeado y lo ejecutado, así como sus resultados.

En Benicarló, si bien el actual equipo de gobierno esgrime tener un proyecto de ciudad, desde la oposición, además de desconocerlo, entendemos que no existen ideas, ni planificación, ni coordinación, ni orientación. Si bien puedan creer conocer nuestras necesidades, creo hace falta aquel previo diagnóstico técnico, imparcial y externo, que ayude a diseñar un verdadero proyecto de ciudad, con una planificación acorde a las necesidades actuales y futuras.

Sin un proyecto de ciudad técnicamente diagnosticado y diseñado, y sin coordinación, no se atenderán las necesidades de los ciudadanos. H

*Portavoz del PP en Benicarló