La falta de capacidad de la izquierda para pactar entre ellos y su sectarismo al negarse a pactar un gobierno entorno a la lista más votada por los españoles son los motivos que han provocado que este domingo acudamos de nuevo a las urnas.

Ante esta cita electoral, y después de la debacle socialista que prevén las encuestas, ya solo quedan dos opciones: o el Partido Popular o Podemos; el resto será depositar un voto romántico pero nada útil ni que sume a nada para ayudar a formar gobierno.

El voto seguro, que garantiza la bajada de impuestos, la creación de empleo, la unidad, la libertad y la defensa de los intereses del conjunto de la provincia es aquel que lleva el logo del Partido Popular. Nosotros cometemos errores, como todo el mundo, pero cada día nos levantamos con las ganas, la ilusión y la fuerza para sacar adelante un proyecto que nos apasiona.

Por experiencia en aquellos ayuntamientos donde gobiernan ya sabemos que el voto a Podemos solo sirve para destruir todo aquello que ha costado tantos años levantar y que con tanto esfuerzo hemos logrado recuperar en estos últimos cuatro años. La nueva política utiliza muchas palabras bonitas pero no tiene bases sólidas detrás y está condenada a su propio derrumbe arrastrando tras de sí a toda la sociedad.

El domingo no se puede desperdiciar ningún voto. Es preciso un voto útil para la provincia y para España, un voto que sume diputados a la mayoría y que los sume a un proyecto donde no se excluye a nadie y donde se piensa en mejorar la calidad de vida de todos. H

*Diputado provincial del PP