Un mes que empieza a contar este viernes. El proyecto de presupuestos del gobierno municipal de Barcelona en Comú y el PSC ha sido derrotado de nuevo en el pleno municipal,como lo fue ya en comisión y en comisión extraordinaria. A favor, 15 votos, los de BC y los socialistas; en contra, 26, los del resto de grupos. Y con ello se ha activado el mecanismo de la aprobación de las cuentas vinculado a una cuestión de confianza.

Si los grupos de la oposición alcanzan un acuerdo que tenga el respaldo de 21 concejales, estarán en posición de elegir a un nuevo alcalde y descabalgar a a Ada Colau. Pero como la concejal de CiU Sònia Recasens ha subrayado durante el debate sobre el proyecto presupuestario, eso es más imposible que difícil: “Solo la debilitad aritmética alternativa hará que usted siga al frente de la alcaldía en febrero”.

El presidente del grupo del PP, Alberto Fernández Díaz, parece el único dispuesto a luchar en esa trinchera: “Veamos si somos capaces poner Barcelona por encima de siglas para construir una ciudad mejor con otra alcaldía”. El concejal ha acusado a la alcaldesa de “ampararse en un privilegio legal” cuando, presuntamente, ha argumentado, ella combate los privilegios. Y ha parafraseado a Churchill para una de sus frases de impacto: “Nunca tan pocos gobernaron de forma tan autoritaria”.

Colau ha aprovechado la frase de Recasens para retar a la oposición: “La aritmética no me salva. Tienen un mes para generar una alternativa de gobierno. Tanto diálogo que reclaman, usteds lo pueden hacer. Y lo dan por perdido”. Y ha proseguido advirtiendo de que si pudiera convocaría elecciones, y se intuye que cree que el resultado no le iría mal: “No estoy aquí para mantener mi silla. Le daría la voz a la ciudadanía, pero la ley no lo permite”.

NEGOCIACIÓN INEXISTENTE

La jefa de filas de Ciutadans, Carina Mejías, ha criticado la falta de negociación por parte del gobierno municipal, si bien esta ha sido una queja compartida por toda la oposición. Mejías ha vuelto a pedir, también, que el primer teniente de alcalde, Gerardo Pisarello, deje de ser el que negocia con los grupos.

El socialista Jaume Collboni ha denunciado que el debate de este pleno no era de presupuestos sino político, ha acusado a la oposición de buscar un desgaste y ha puesto como ejemplo de capacidad de pacto al PSC, por su acuerdo presupuestario con el entonces alcaldeXavier Trias para la aprobación de las cuentas del 2015. Collboni ya ha apuntado a ERC, y la alcaldesa ha asumido la principal artillería contra los republicanos.

LA IZQUIERDA, QUÉ PENA

Porque Colau ha echado mano de un recurso habitual en el contexto de la pugna política de su partido con ERC, un pulso que no se circunscribe al ayuntamiento, que mira al futuro político de la Generalitat. Una rivalidad, en definitiva, que ha reservado a CiU el papel de enemigo entrañable en el discurso de la exportavoz de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca: “Es lógico que no haya un pacto presupuestario con CiU, está en juego el modelo de ciudad. Sí que sabe mal y genera perplejidad que con las fuerzas de izquierda no se puedan cerrar acuerdos. Pueden cerrarlos en el otro lado de la plaza de Sant Jaume, donde gobierna la derecha catalana, pero aquí no pueden votar los presupuestos”.

Aunque la CUP estaba también en el saco de esa invectiva, ERC ha entendido para quién era muy especialmente la bofetada. Alfred Bosch ha contestado dando a Colau “pistas” de por qué no existen esos acuerdos con la izquierda: por los incumplimientos de pactos anteriores entre ambas formaciones, por haber convertido al PSC, “a quien llamaban la mafia de Barcelona”, en su socio y porque sus homólogos en el Parlament, Catalunya Sí que es Pot, no han apoyado los presupuestos del Govern de JxSí.

LA CUP: HEMOS VUELTO AL 2015

Por la CUP, María José Lecha ha repasado los incumplimientos del gobierno municipal en relación con pactos con su grupo y ha sido rotunda al denunciar que Colau no ha traído el cambio prometido: “Presentáis los presupuestos que os ha dado la gana. Ahora ya sabemos a hasta dónde llega al gran cambio. El giro municipal ha sido de 360 grados y volvemos a estar en mayo del 2015”.