"Es el primer sindicato patriótico y antiseparatista en España, el primer sindicato anticomunista y el primer sindicato contra las oligarquías corruptas", ha sentenciado Santiago Abascal sobre Solidaridad, la agrupación de trabajadores que ha impulsado Vox y que ha echado a andar este lunes. En un acto en el que se ha cargado duramente contra el actual Gobierno de coalición y contra UGT, CCOO y patronal, el líder de extrema derecha ha asegurado que la creación de este sindicado -homónimo al organismo que se creó en Polonia para luchar contra el comunismo en los años ochenta- supone un "acto histórico" para acabar con las mafias sindicales.

Tras varios meses pregonando la puesta en marcha de Solidaridad, Abascal ha aplaudido la "valentía" de los fundadores del sindicato, tratando de desmarcarse de la organización de trabajadores para dotarla de cierta independencia. "Vox no crea un sindicato, Vox apoya a españoles que han decidido crear un sindicato", ha matizado. Además, en este sentido, ha puntualizado que "no siempre" estarán de acuerdo con las posiciones que adopten pero que les desean "lo mejor del mundo".

El líder ultra ha estructurado todo su discurso en torno a la lucha que deberá dar Solidaridad ante los sindicatos "izquierdistas de clase", "corruptos, extremistas" y que defienden "intereses exclusivamente ideológicos" y contra el Gobierno que está "en manos de la mafia de la corrupción", "de mafias golpistas separatistas que determinan quién está en el poder", "en las mafias del narcotráfico dirigidas desde lugares lejanos y que controlan la vicepresidencia de Pablo Iglesias", y "de las mafias de la inmigración ilegal".

CUESTIONES POLÉMICAS

El sindicato ha presentado las 12 medidas en las que trabajarán. Algunas de ellas muy polémicas. Así, entre sus planteamientos se puede encontrar la intención de priorizar a los trabajadores residentes en España para el acceso a los puestos de trabajo, "limitando la inmigración ilegal a las necesidades reales del mercado laboral y a la capacidad de adaptación cultural del inmigrante" y "facilitar la repatriación de los inmigrantes que no encuentren empleo".

En la misma línea, sostienen que hay que "acabar con la inmigración ilegal promovida por el gobierno junto a determinadas oeneges" que utilizan "al inmigrante como mano de obra esclava". Ademas, apuntan a la necesidad de acabar con las subvenciones para sindicatos y patronal.