Ha bastado que la ministra de Política Territorial, Meritxell Batet, concediera la primera entrevista como titular de la cartera, concretamente a El Periódico de Catalunya, para que PP y Ciudadanos reaccionaran con virulencia, dejando claro que en el tema catalán ambas fuerzas de la oposición se van a mostrar inflexibles. ¿Qué dijo la ministra? Que el asunto de los políticos catalanes presos, de su acercamiento, depende de los jueces y que ella vería bien que su traslado a centros de Cataluña.

A esto se suma el anuncio hecho en un acto del PSC de abrir la posibilidad de reformar la Constitución y que, en la propia entrevista, expresó el deseo de que los partidos independentistas, así como los propios PP y Cs, se incorporen a la comisión del Congreso que debe de abordar una reforma, ya se cuentan con los ingredientes para empezar a erosionar a Sánchez

Al hilo constitucional, la vicesecretaria de Estudios y Programas del PP, y diputada en el Parlament, Andrea Levy, reprochó a Sánchez que «lo primero que haga» sea «contentar» a los independentistas con el anuncio de una reforma constitucional. Levy, además, afeó a Batet que hiciera tal anuncio «a espaldas» del partido que tiene «la mayoría en el Congreso y en el Senado», es decir, el PP.

Y sobre el acercamiento de los políticos presos a cárceles catalanas, Levy recomendó a Sánchez «que no interfiera» en la acción de la justicia al no ser «bueno» hacer concesiones políticas en temas que están «judicializados», y recriminó al presidente que utilice esta cuestión para hacer un «trueque» político.

Ciudadanos, por su parte, percutió en la misma idea del PP, la del retorno del apoyo a la moción de censura, por parte de Sánchez. Su diputada en el Parlamento catalán Sonia Sierra aseveró que Sánchez «está empezando a pagar las letras de la hipoteca» con los independentistas catalanes, «primero con el levantamiento del control financiero y ahora», en referencia a la entrevista a Batet, «que se vea con buenos ojos el acercamiento de los presos soberanistas».

Respecto a la reforma constitucional, la diputada de Ciudadanos explicó que su formación es una «firme defensora» de una modificación de la Carta Magna pero para acabar con los «privilegios» y para garantizar la igualdad entre comunidades, en ningún caso para «contentar a aquellos que quieren romper España».

Sierra también se mostró muy crítica con la posibilidad de recuperar aquellos artículos del Estatut que fueron suspendidos por ser «inconstitucionales».