La Audiencia Nacional sostiene que Jordi Pujol Jr. usó a su hija, Nuria, para blanquear casi medio millón de euros con una donación para comprar una casa. Este es uno de los motivos que, según los jueces, justifican el embargo de sus cuentas y de su exmujer, Mercè Gironès. Ambos están imputados por blanqueo de capitales, delitos fiscales y falsedad.

La sección tercera de la Audiencia confirma la decisión del juez José de la Mata de embargar las cuentas del matrimonio Pujol Gironés porque en ellas aparecen saldos por un importe de 11,5 millones de euros que han sido facturadas a empresas adjudicatarias de obras públicas en Catalunya. Los magistrados reprochan al primogénito de los Pujol que no haya aportado facturas u otros documentos que justifiquen estos ingresos.

El tribunal también señala, como prueba de la presunta actividad de blanqueo de capitales, la compra de un terreno en Palamós por un importe de 217.000 euros que fue vendido "pasados menos de tres años" por 4,8 millones de euros. Esta cantidad fue pagada por Copisa "metida de lleno en los concursos del sector público".

Asimismo, los magistrados sostienen que Pujol Jr. "es el destinatario" de la "singular" compra-venta de un inmueble que adquiere su hija Nuria con el dinero que le ingresó su padre y que pertenecía a una de las sociedades. "En definitiva"-dicen los jueces- Pujol hijo "recupera el dinero de la donación (585.000 euros)" aunque recupera 495.000 euros pues la diferencia, según los jueces, se utilizó "para pagar los impuestos de la operación".

DIVISAS

Además, la sala reprocha a Gironés que sus cuentas hayan pasado de 106.000 euros a los 12 millones de euros en apenas cuatro años. Y que los movimientos de divisas de las mismas hayan alcanzado los 22 millones de euros en entradas y los 32 en salidas. Estos movimientos no han podido ser justificados, según el tribunal. Y le recriminan que haya negado que era titular de una cuenta en Andorra cuando la investigación judicial así lo ha acreditado.

El juez José de la Mata investiga a la familia Pujol por el cobro de comisiones a empresas que lograron contratos de la administración catalana y por haber montado un entramado empresarial en paraísos fiscales para blanquear sus ganancias. El togado ha rechazado que el origen de este dinero provenga de la herencia de Florenci Pujol, padre del expresident de la Generalitat.